Con armas y vehículos blindados o en caballería montada, las mujeres representaron casi un cuarto de los elementos de las Fuerzas Armadas del desfile militar este año.
Escucha este especial de los espacios que han ganado las mujeres en las Fuerzas Armadas.
Hazel Zamora
Cada 16 de septiembre desde temprana hora miles de familias mexicanas se concentran en las calles del Zócalo capitalino para apreciar el desfile militar que conmemora la Independencia del país. Esta tradición, que surgió en 1918, inspiró a mujeres como Paola Mendiola y Karla Alexa Linares a sumarse a las filas de las Fuerzas Armadas.
Desde que asistía, Paola sintió la emoción al observar la disciplina y los atuendos de aquellas personas que marchaban:
“Mis padres me llevaban a los desfiles y algo que me llamaba mucho la atención era cómo lo hacían todo tan meticuloso. El simple hecho de tener su uniforme impecable, de marchar con tanta disciplina es algo que me llamaba mucho la atención y yo le decía a mis padres: yo quiero pertenecer al Colegio Militar, yo quiero ser parte de ahí, yo quiero vivir esa experiencia”.
Para Karla el sentimiento era el mismo, así que preguntó directamente a los cadetes cómo formar parte de ellos:
“Yo siempre desde niña veía los desfiles, era algo que me emocionaba demasiado, era algo que me gustaba y siempre quería yo estar ahí. Una vez tuve la oportunidad de ir a uno de los desfiles y preguntándole a los cadetes, ellos fueron los que me dieron un poquito más de información para poder ingresar a este plantel”.
Con 21 años de edad ambas ahora son cadetes de tercer año en el Heroico Colegio Militar y forman parte de las 3 mil 445 mujeres que desfilarán por los 214 años de la Independencia de México.
Estudiante del Heroico Colegio Militar en el ensayo para el desfile militar. Foto: Karen Tlali
¿Cómo se preparan Paola y Karla para el próximo desfile?
En entrevista para IMER Noticias nos compartieron su proceso de preparación para el desfile militar. Paola Mendiola, cuenta que lo construyen día a día con el adiestramiento que reciben dentro del Sistema Educativo Militar:
“Todos los días corremos por la mañana y por las tardes. Nosotros entrenamos mucho aquí, mucho deporte y nos alimentan de forma correcta, hay nutriólogos que ven nuestra alimentación, también de forma mental.
Nos coordinamos entre nosotros mismos, por ejemplo, realizamos algo que se llama orden cerrado, que es la disciplina en marchar para que los pasos salgan de forma adecuada para que uno con otro vayamos de forma sincronizada”.
Paola Mendiola, estudiante del Colegio Militar. Foto: Karen Tlali.
La columna de este desfile, que hace su recorrido por el Zócalo, requiere de un mes de ensayos. Esto les implica preparar antes los uniformes que lucirán durante la demostración de las Fuerzas Armadas, destacó Karla Linares:
“Siempre comenzamos con tiempo de anticipación las prácticas, el prestigio de nuestros uniformes y el saber que vas a poder estar ahí y vas a poder ver a tu familia y tu familia te va a poder ver, creo que es lo que más, más me genera emoción”.
Con meses de antelación, Paola arregla su uniforme para estar cómoda y lucir pulcra:
“Nosotros mismos los arreglamos y es para prestigio para vernos bien, para sentirnos bien y estar cómodos es algo que sí lleva algún tiempo, como dos o tres meses antes de esto si requiere”.
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Las mujeres en las Fuerzas Armadas
La participación de las mujeres en el ámbito militar tiene su origen desde la Independencia y la Revolución mexicana. Pero fue en 1934 cuando María González de Carter se convirtió en la primera mujer en incorporarse al Ejército y la Fuerza Aérea Mexicana. Cuatro años después, se creó la Escuela para Enfermeras del Ejército, que hasta ese momento fue su principal oportunidad, ya que, sólo podían ingresar mujeres.
En el caso de la Secretaría de Marina, tiene origen en 1940 pero fue hasta 2010 cuando finalmente las mujeres se incorporaron a las unidades de Infantería de Marina.
Actualmente, ellas desempeñan distintos cargos como aviadoras, médicas, ingenieras y administrativas militares. Betzabel Reyes, otra cadete del cuarto año del Colegio Militar, consideró que ya existen condiciones de igualdad entre sus compañeros:
“De hecho, por el mismo desconocimiento muchas se sienten desconfiadas y piensan que el trato aquí es muy malo y realmente no. Estamos en otros tiempos, los hombres han sabido trabajar con nosotras, nos respetan como una compañera de trabajo, las actividades son igual que los hombres.
¿Por qué? porque somos capaces y es lo que intentamos transmitir, de hacer las mismas actividades que los hombres, demostrar que nosotras como mujeres también podemos ser como ellos, entonces las actividades aquí son por igual. Todos corremos, todos marchamos, todos hacemos todo”.
Es justo el 16 de septiembre es el día para demostrar su presencia en las Fuerzas Armadas. Algunas han hecho historia, como el caso de la pilota Karen Velázquez Ruíz, la primera mujer en volar —durante el desfile militar de 2019— un avión de combate F5 ultrasónico, el más veloz de la Fuerza Aérea Mexicana:
“Yo creo que ya cuando tú entras y empiezas a conocer a todas las cadetes, te das cuenta que ya hay mujeres en las Armas, mujeres infantes, mujeres del arma blindada, es lo que más te genera emoción. Creo que es algo que hizo que pues sintiera que pertenecía aquí porque ya está creciendo esto para nosotras las mujeres, ya somos parte dé”.
Karla Alexa Linares, estudiante del Colegio Milita. Foto: Karen Tlali.
Las mujeres en los 214 años de la Independencia
De acuerdo con datos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), en el Ejército Mexicano y Fuerza Aérea, actualmente hay más de 25 mil mujeres. Esta cifra representa el 11.8% del total de elementos.
Para el desfile militar de este año participan 15 mil 593 integrantes de la Guardia Nacional, Ejército, Fuerza Aérea y Armada. Las mujeres representan el 22% de la columna del desfile:
“Creo que cada año, hay algo que distingue, por ejemplo, este año vamos a poder encontrar a bastantes mujeres que pertenezcan a la armada blindada, van a ir en los vehículos blindados, va ser algo que distinga muchísimo. Incluso a las mujeres que van a pertenecer al arma de caballería, van a ir montadas. Yo creo que este año es lo que más sobresale, que las mujeres vamos a estar completamente presentes en este desfile”.
Las tres jóvenes cadetes esperan, que al igual que ellas, otras niñas se sientan inspiradas para entrar a las Fuerzas Armadas después de verlas desfilar este 16 de septiembre.
Paola se alegra de recibir el apoyo de los asistentes así como de los halagos:
“Vas marchando y te van aventando confeti y sientes la grandeza de ¡ay, es mujer! ¡es el colegio! La verdad se siente muy bien, algo que a mí en lo particular me gusta. Es eso de que sabes que te costó estar ahí, pero estás ahí y está la gente apoyándote, es lo mejor”.
Betzabel reconoce que en el Colegio Militar las mujeres pueden salir adelante sin importar su origen o estilo de vida, al contrario, su esfuerzo siempre va a destacar:
“A mí me gustaría que ellas sepan que sí se puede, que se puede todo, no importa de dónde vengas, ni quién seas, se puede salir adelante. Aquí la gente siempre va a notar tu esfuerzo, no quién seas o como te hayan clasificado, una se puede dar el valor y salir adelante”.
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