Tercer debate presidencial: entre nuevas acusaciones y llamados a votar

Los temas del tercer debate presidencial fueron política social, seguridad, migración, democracia, pluralismo y separación de poderes.

 

Misael Roldán

 

Este domingo 19 de mayo, las candidatas y el candidato a la Presidencia de la República tuvieron la oportunidad de defender sus propuestas y proyectos de nación en el Tercer Debate Presidencial, titulado “Democracia y gobierno: diálogos constructivos”, que se llevó a cabo en el Centro Cultural Universitario Tlatelolco, en la Ciudad de México.

 

Pasadas las 8 de la noche, arrancó el primer segmento del debate en materia de política social. Jorge Álvarez Máynez, candidato de Movimiento Ciudadano, afirmó que México es uno de los países más desiguales del mundo. Por ello, propuso aumentar el salario mínimo a 10 mil pesos mensuales, además de establecer dos días de descanso a la semana.

 

En seguida, Claudia Sheinbaum, candidata de la coalición Sigamos Haciendo Historia, comenzó su participación señalando que a 28 millones de hogares mexicanos llega al menos un programa social. Aseguró que, de ganar la Presidencia de la República, implementará dos más: apoyos económicos para mujeres de 60 a 64 años y una beca universal para estudiantes de educación básica en escuelas públicas.

 

 

Por su parte, Xochitl Gálvez, aspirante presidencial de la alianza Fuerza y Corazón por México, se comprometió a dar subsidios para madres trabajadoras, restablecer las estancias infantiles, construir 5 millones de viviendas en su sexenio, y reducir de 65 a 60 años la edad para recibir la pensión de adulto mayor que otorga la actual administración.

 

 

Propuestas de seguridad

 

Para el segundo bloque en materia de inseguridad y crimen organizado, la candidata de PAN, PRI y PRD, ofreció acabar con la política de seguridad actual.

 

“Yo propongo una nueva estrategia de seguridad; se acabaron los abrazos a los delincuentes, la Guardia Nacional tendrá un mando civil, las Fuerzas Armadas solo se enfocarán a lo que establece la Constitución: la seguridad nacional. Vamos a fortalecer a las policías estatales y municipales pagándoles bien y certificándolas, tecnología en todas las colonias”.

 

En cuanto a la candidata de Morena, Partido Verde y Partido del Trabajo aseguró que mantendrá las reuniones del gabinete de seguridad todos los días; se comprometió a catalogar la extorsión como un delito grave, además de implementar cuatro ejes de seguridad.

 

“Como lo hicimos en la Ciudad de México, atención a las causas y cero impunidad. ¿Cómo lo vamos a seguir haciendo en el país? Son los mismos cuatro ejes: atención a las causas, más y mejor mejor Guardia Nacional: 140 mil elementos que hoy son una institución que tiene el reconocimiento del 86 por ciento de la ciudadanía. Vamos a hablar de inteligencia e investigación y por supuesto de coordinación”.

 

En su participación, Álvarez Máynez, dijo necesario cambiar el enfoque de los delitos de alto impacto para evitar encarcelamientos por decisiones personales como el aborto o el consumo de marihuana. Además de fortalecer la Coordinación Nacional de Búsqueda, desarrollar un centro de identificación humana y mejorar los salarios para las policías.

 

“Y hacer una estrategia en la que, por la vía civil, formemos una policía competente, una Policía Nacional de Caminos que recupera el control del territorio nacional, pero también poniendo orden. ¿Qué necesitamos hacer? Darles capacidades y facultades a las policías y a los policías, facultades de investigación, darles un salario digno, seguro de gastos médicos mayores y seguro de vida. Y darles un horizonte, una carrera policial que les permita tener incentivos para jugarse la vida por nosotros”.

 

 

Migración y política exterior

 

En el bloque de migración y política exterior, Sheinbaum Pardo subrayó la importancia de fortalecer las relaciones con Estados Unidos y Canadá, así como con América Latina. Por otra parte, enfatizó en la necesidad de abordar las causas estructurales de la migración, así como a crear un polo de desarrollo en la frontera con Guatemala.

 

“Generar un polo de desarrollo en el sur de nuestro país, en la frontera sur, y además lo que queremos hacer es desarrollar esa frontera. Se está planteando que el tren maya, que el tren interoceánico, que son dos proyectos fundamentales, puedan incluso llegar a Centroamérica, de tal manera que se desarrolle un polo de bienestar y un polo de desarrollo económico. Esa es la mejor manera de poder ofrecer incluso trabajo a los migrantes”.

 

Xóchitl Gálvez, por su parte, criticó duramente la situación actual de la política exterior, describiéndola como “un desastre” y enfatizó en que México tiene el potencial de ser un vínculo crucial entre América del Norte y América del Sur, además de otorgar visas de trabajo para mexicanos o migrantes.

 

“Hoy la política migratoria la define el crimen organizado; nosotros vamos a demandar un programa de regularización para los migrantes en Estados Unidos. Vamos a ampliar el programa de trabajadores con los Estados Unidos, dotar de recursos a los consulados, pero sobre todo lo que digo: dar visas de trabajo a quien se les tengan que dar y fortalecer la frontera sur”.

 

Máynez hizo un llamado a tener firmeza e inteligencia en la relación con Estados Unidos, especialmente si Donald Trump, a quien calificó de “racista”, vuelve al poder. También dijo que las embajadas “dejarán de ser refugios para corruptos”, y que su primera reunión internacional como presidente de México sería con su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva.

 

“Y por eso he dicho que la primera reunión con un jefe de Estado a la que yo convocaría sería con el presidente Lula. Haciendo equipo con el presidente de Brasil, podemos tener objetivos comunes que fortalezcan nuestra relación con los Estados Unidos. También hay que tener claridad en los temas. Yo he dicho que voy a retomar la iniciativa que tuvo Marcelo Ebrard de tratar el tema del tráfico de armas de los Estados Unidos a México”.

 

 

Democracia y sistema judicial

 

El último bloque del Tercer Debate Presidencial llamado democracia, pluralismo y división de poderes, hizo coincidir a los tres candidatos sobre que el Poder Judicial necesita una reforma. Sin embargo, cada uno defendió sus matices.

 

La candidata panista se pronunció en contra de que los ministros sean electos por “cuotas o cuates”, como ella lo dijo. Detalló que “se debería hacer mediante consultas a universidades y barras de abogados”.

 

El aspirante presidencial de Movimiento Ciudadano abogó por una reforma al Poder Judicial que no vulnere su autonomía ni concentre más el poder, sino que genere mejores designaciones y separe el Consejo de la Judicatura y la Suprema Corte, garantizando la autonomía y libertad de las juezas y jueces.

 

Para cerrar este bloque, la exjefa de gobierno defendió la reforma promovida por el presidente López Obrador y se mostró a favor de desaparecer los puestos plurinominales.

 

 

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