Por primera vez, 213 diputadas y diputados buscan reelegirse, sin la necesidad de abandonar su curul para hacer campaña.
Te presentamos un panorama de los representantes populares que pretenden reelegirse.
Claudia Téllez
Diputados y candidatos. Candidatas y diputadas. Por primera vez los inquilinos de San Lázaro contienden en un proceso electoral sin la necesidad de abandonar su curul.
Se trata de 213 diputadas y diputados que buscan mantener ese cargo por un periodo más. En la lista hay de todo: coordinadores parlamentarios, plurinominales, quienes se estrenaron como legisladores federales en la actual legislatura y quienes tienen una larga trayectoria.
Te presentamos las cartas credenciales con las que estos representantes populares pretenden reelegirse.
Productividad: la carta de presentación
Llegaron a San Lázaro por primera vez en 2018 y ahora, por decisión de sus partidos, quieren saltar a la siguiente Legislatura.
Así es el caso de la diputada de Morena, Wendi Briseño, presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, quien ha presentado de manera personal 24 iniciativas y ha hablado en tribuna 51 ocasiones. También el de su compañero de bancada, Sergio Gutiérrez Luna. El representante de Morena ante el Instituto Nacional Electoral ha presentado 11 iniciativas y participado 14 veces ante el pleno.
Quien conoce bien la tribuna es el panista José Elías Lixa, con al menos 164 intervenciones y 11 iniciativas presentadas.
Desde el frente del PRD, la diputada Frida Alejandra Esparza ha sido iniciante de 31 propuestas de ley y ha registrado 58 participaciones en tribuna.
Con muy poca producción, pero con la intención de reelegirse se encuentran la morenista Manuela del Carmen Obrador, con dos participaciones en tribuna y una sola iniciativa presentada a título personal.
En la misma situación están sus compañeras de bancada, Katia Alejandra Castillo, con cuatro iniciativas propias y cinco participaciones en tribuna e Inés Parra Juárez con ninguna iniciativa personal y 12 intervenciones en el pleno.
Pero la baja productividad no es exclusiva de los primerizos. En ella también cayeron aquellos que pueden presumir de una trayectoria legislativa.
Tal es el caso del diputado del Partido Verde, Carlos Alberto Puente Salas, que solo ha presentado una iniciativa propia o del panista José Isabel Trejo, de quien no hay registro de propuestas de ley a su nombre.
Los aferrados
Panistas, priístas, perredistas y ahora morenistas. La lista de quienes no quieren dejar su curul incluye a legisladores con experiencia porque ya han sido diputados federales o locales e incluso senadores.
Entre ellos está el coordinador del PAN, Juan Carlos Romero Hicks, quien antes de llegar a San Lázaro ya había sido senador, por lo que de resultar reelecto sumará tres periodos al hilo como legislador federal.
Quien también busca su tercera oportunidad como legisladora es la perredista Verónica Juárez Piña. La coordinadora de bancada ya había ocupado un curul entre 2012 y 2015. En sus tres años fuera del Congreso ocupó distintos cargos dentro de su partido.
Sin embargo, la medalla se la lleva el morenista Pablo Gómez, quien al concluir esta legislatura sumará 24 años de experiencia como legislador y va por otros tres. El dirigente del Movimiento de 1968 inició su trayectoria legislativa en 1982, ha sido diputado en cinco ocasiones, primero por el PRD y ahora por Morena, senador y diputado local en la Segunda Asamblea de Representantes del Distrito Federal.
Pero no todos los reelegidos serán elegidos. Es es el caso del coordinador de Morena, Ignacio Mier, el legislador que se estrenó como diputado federal en 1997, bajo la bandera del PRI, partido con el que avaló el Fobaproa. Hoy, pretende quedarse en San Lázaro por la vía plurinominal, es decir, sin hacer campaña y sin que la gente vote directamente por él, por lo que su permanencia en la cámara baja dependerá de los votos que en su conjunto reciba su partido.
Los polémicos
En la lista de quienes buscan la reelección en la Cámara de Diputados también hay quienes dieron de qué hablar, aunque no por su trabajo legislativo.
Entre los perfiles polémicos destaca el de Nayeli Salvatori, quien llegó a San Lázaro por Encuentro Social pero se adhirió a Morena en los primeros días de marzo, antes de que iniciaran las campañas. Conductora de programas de radio, en 2018 expresó su indignación por una mujer que amamantaba en público, tiktokea en San Lázaro y recientemente, en un video, habló sobre una presunta red de prostitución en la Cámara, pero más tarde borró la publicación.
En en listado morenista también se encuentra Emmanuel Reyes Carmona, quien ha defendido al líder de la Iglesia de la Luz del Mundo, Naasón Joaquín García, actualmente detenido en Estados Unidos acusado de abuso sexual de menores, tráfico de personas y pornografía infantil.
Desde la bancada del PT destaca el diputado Gerardo Fernández Noroña, el polémico opositor de la oposición y quien en esta legislatura tuvo que pedir una disculpa pública a la panista Adriana Dávila por comentarios considerados como violencia de género por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. De no haberlo hecho, el legislador habría sido incluido en el Registro Nacional de Personas Sancionadas en Violencia Política Contra las Mujeres en Razón de Género, lo que le hubiera impedido participar en el proceso electoral.
Entre los petistas también está Mauricio Toledo, quien originalmente llegó a San Lázaro por el PRD. El ex delegado de Coyoacán enfrenta un proceso de desafuero a petición de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México para juzgarlo por presunto enriquecimiento ilícito.
Los que quedaron fuera
Fuera de las listas de reelección quedaron personajes con largas trayectorias, como el morenista Porfirio Muñoz Ledo, ex presidente de San Lázaro y quien entregó la banda presidencial a Andrés Manuel López Obrador.
Tampoco buscarán un periodo más, por decisión de sus partidos, el coordinador del PRI, René Juárez Cisneros, ni la panista y ex presidenta de la Mesa Directiva, Laura Rojas, quien contenderá por una diputación local en el Estado de México.
Y en medio de acusaciones de abuso sexual en contra de un menor, que derivó en su detención y posterior liberación, el morenista Saúl Huerta renunció recientemente a su intención de reelegirse. La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México ya anunció que pedirá su desafuero.
En total, son 213 de los 500 diputados y diputadas federales los que pretenden saltar de Legislatura. Si bien esta es la primera ocasión en la pueden buscar la reelección por tres años más, no será la única, pues la ley ya permite que los inquilinos de San Lázaro hagan períodos consecutivos hasta por 12 años.