Calderón no sabía lo que implicaba enfrentar al crimen organizado y los muertos se cuentan por cientos de miles, dice la escritora Guadalupe Correa-Cabrera.
Escucha la entrevista de Guadalupe Correa-Cabrera con Elia Baltazar.
IMER Noticias
El ex presidente Felipe Calderón (2006-2012) improvisó una guerra con el narco que ha dejado centenas de miles de muertos en el país, dice la doctora en Ciencias Políticas, Guadalupe Correa-Cabrera, quien junto con Tony Payán escribió un libro para comprender este episodio de la historia reciente de México.
Usa la palabra “improvisación” porque el exmandatario no sabía exactamente lo que implicaba declararle la guerra al crimen organizado, inmerso ya en las Fuerzas Armadas que él mismo comandaba.
“Esta historia no solamente es la historia del presidente con su hombre fuerte que es Genaro García Luna, con las personas que implementaron y diseñaron una estrategia, sino también es una historia para ver cuál fue el papel de los gobernadores de la oposición, también de la sociedad civil, porque la sociedad civil también tuvo un papel interesante. Los diferentes actores de la sociedad civil que estuvieron muy presentes y también operaron muy de la mano del presidente de esa administración. No estaba el país preparado para la implementación de una estrategia de este nivel que hasta hoy nos lleva a tener centenas de miles de muertos”.
El libro “La guerra improvisada. Los años de Calderón y sus consecuencias” recopila 34 entrevistas con personajes clave de ese episodio, incluidos los estrategas y ejecutores de la guerra contra el narco, que coinciden en que al expresidente le urgía legitimarse, tras llegar al poder en medio de unas elecciones cuestionadas y reñidas.
“Algunos de los entrevistados nos dijeron que Calderón declara esta guerra contra las drogas para obtener legitimidad después de este proceso (electoral), pero también sabemos que antes de ese proceso ya (existía) la militarización de la delincuencia, la para militarización de la delincuencia organizada, porque hay obviamente actores vinculados al Estado, porque tenemos fuerzas especiales del Ejército mexicano formando esta agrupación de los Zetas que empezó a operar con los con el Cártel del Golfo y la situación en varias partes del país fue complicada”.
En el libro se expone también cómo la guerra contra el narco se intenta corregir en la marcha, pero sólo va creando una bola de nieve difícil de controlar y que creció a lo largo de los años.
“Le quedó grande el traje militar al ex presidente Felipe Calderón, seguimos viendo los resultados de este periodo de la historia del país, el problema que dejó también de corrupción su hombre fuerte de la seguridad preso en los Estados Unidos (Genaro García Luna). Es una época que no podemos olvidar, que debemos de estudiar y que debe hacerse justicia, porque en realidad en nuestro país lo ha pagado con muchas muertes, con inestabilidad, con una situación que nos sigue afectando de manera muy importante y que sigue acabando con la vida de muchos mexicanos”.