Se emitieron 292 votos a favor, 153 en contra, así como 11 abstenciones. La Cámara de Diputados analiza los artículos reservados.
Claudia Téllez
Con el voto en contra de la oposición y en medio de reclamos y acusaciones, el Pleno de la Cámara de Diputados aprobó en lo general las reformas a la Ley de Hidrocarburos que busca el fortalecimiento de Petróleos Mexicanos.
Se emitieron 292 votos a favor de Morena y sus aliados, así como 153 en contra de PAN, PRI, Movimiento Ciudadano y PRD, así como 11 abstenciones del Partido Verde.
La reforma también busca fortalecer y recuperar el mercado para Petróleos Mexicanos y endurecer el combate al contrabando, robo y venta de litros incompletos de gasolinas.
Al fundamentar el dictamen, el presidente de la Comisión de Energía, Manuel Rodríguez, destacó que esta reforma está motivada para superar la dependencia energética del país.
“Estaba plenamente fundada y motivada a partir de los esfuerzos por superar nuestra dependencia energética, reflejada en la importación de un 70 por ciento de combustibles, que nos convierte en el país petrolero que más gasolina importa en el mundo; esto es producto de una disminución del 50 por ciento de la producción de hidrocarburos de 2004 a 2018, así como del robo y contrabando de combustibles en las últimas décadas, afectando la economía de los hogares y las finanzas nacionales”.
En la presentación de este dictamen destacó la importancia del combate al contrabando y al mercado ilícito, que han dejado pérdidas por unos 23 mil millones de pesos y también en el contrabando técnico que interna mercancías subvaluadas y que ha dejado pérdidas por unos 11 mil millones de pesos.
El dictamen establece la suspensión de servicios temporal o definitivamente para transporte, almacenamiento, distribución, comercialización y expendio al público de hidrocarburos por peligro inminente a la seguridad nacional, la seguridad energética o la economía nacional.
Se modificó el artículo 59 bis para que la resolución sea fundamentada y el permisionario tendrá 15 días una vez notificado para exponer lo que a su derecho convenga y la autoridad en el mismo plazo deberá resolver.
También se incluyó un artículo transitorio para establecer que la Comisión Reguladora de Energía y el Servicio de Administración Tributaria deberán revisar el cumplimiento de las disposiciones para la medición de hidrocarburos petrolíferos y petroquímicos.
Durante el debate en el pleno, Morena y sus aliados destacaron que es una propuesta para salvaguardar la soberanía energética que impactará en la economía nacional.
La morenista Beatriz Robles destacó que esta reforma garantizar la soberanía energética y también tarifas justas.
PAN, PRI, PRD y Movimiento Ciudadano advirtieron que esta reforma va en contra de la Constitución y tratados internacionales, desalienta la inversión y advirtieron que al igual que las reformas de la Ley a la Industria Eléctrica su resolución estará en manos de la Suprema Corte de Justicia, porque le lloverán amparos.
El panista Justino Arriaga Rojas afirmó que esta reforma, que nació muerta, representa un duro golpe al Estado de Derecho. Su compañera de partido María de los Ángeles Ayala llevó a la tribuna un par de marionetas para acusar de títeres a los legisladores de la mayoría.
El priista Enrique Ochoa reconoció que las modificaciones al artículo 59 aportan elementos de certeza, pero se mantiene el artículo sexto transitorio que prevé la revocación de permisos y advirtió sobre los riesgos para la población.
“Esta reforma producirá combustibles caros y va a haber escasez de combustibles si se aplica en sus términos porque establece barreras a la entrada que impiden la competencia económica, competencia económica que fortalece al consumidor y competencia económica que fortalece a Petróleos Mexicanos. Argumentar en contra de eso es tener una visión superada de lo que ya es el avance que tiene este país. Esta reforma no incrementa en nada la producción nacional de gasolina, esta reforma no incrementa en nada la producción de petróleo y gas natural”.