IMER Noticias conversó con el escritor András Forgách sobre su obra titulada El expediente de mi madre y sus influencias literarias.
Carolina López Hidalgo
El expediente de mi madre es una novela en tres partes que combina ficción, humor y la realidad de los informes de los servicios secreto, cartas y poemas.
En esta obra del escritor András Forgách, el autor usa todo lo aprendido para narrar la realidad de su madre, la señora Bruria, una espía de la dictadura de János Kádar.
El novelista, guionista, periodista, poeta y traductor húngaro, András Forgách, sorprende al lector con una narrativa donde combina sus influencias: James Joyce, su padre y su madre, así como una realidad que estuvo envuelta en mentiras
Forgách busca que lectores curiosos observen, por un lado, a una ama de casa inconforme de la pareja, los hijos y la sociedad, y, por el otro, a la agente secreta que muestra inteligencia por su adoctrinamiento de sus padres para ser la comunista perfecta.
El expediente de mi madre surge tras recibir la noticia de que su progenitora fue espía del “kádárismo”, una mujer que asistía a las actividades contraculturales de Forgách, para continuar con su labor e informar lo que los artistas pensaban y hacían.
A pesar de la búsqueda de paz en muchos lugares, esa palabra no resuena como debe ser en su cabeza porque su experiencia con la Paz ha sido caótica, llena de mentiras y de intereses para algunos gobiernos
András Forgách encontró en la escritura y el periodismo la manera de toparse con la verdad, de una historia de vida llena de contradicciones, disfraces e imposturas donde la distancia del tiempo y el espacio pudo apreciar los privilegios que tuvo por el trabajo de su madre.
El expediente de mi madre ha sido traducido a 14 idiomas y se sigue sumando el interés de los lectores por esta obra que conmueve al lector más indiferente.
En la conversación con András Forgách destacó su imparcialidad a los avances tecnológicos como la Inteligencia Artificial y el daño que puede causar a una sociedad que no cambia.
Te recomendamos:
Extrañas: el libro de Guillermo Arriaga escrito con palabras de hace 300 años