Ante el rechazo de la oposición a su reforma constitucional, el presidente buscará que su propuesta alterna se vote antes de finalizar el año.
Guadalupe Franco
El presidente Andrés Manuel López Obrador anticipó que enviará este fin de semana al Congreso de la Unión su reforma legal para hacer ajustes en materia electoral en México.
Luego de que se diera a conocer que se aplazó hasta el seis de diciembre el debate del dictamen de la reforma electoral en el pleno de la Cámara de Diputados, el presidente dijo que buscará que su propuesta alterna se vote antes de finalizar el año.
En su conferencia matutina, el presidente reconoció que ya era un hecho que su iniciativa de reforma electoral sería rechazada por el bloque opositor en la Cámara de Diputados.
“La voy a mandar. ¿Para qué espero si ya es de dominio público que ya se pusieron de acuerdo? Bueno, se pusieron de acuerdo desde hace muchos años, pero en esto ya es muy claro que no quieren ninguna reforma electoral porque quieren tener el control de los órganos electorales, del consejo y del Tribunal Electoral”.
Anticipó que este plan B es para que se realicen las modificaciones en materia electoral, sin tocar la Constitución, las cuales estarían basadas en cambios a leyes secundarias.
El presidente criticó que la oposición quiera seguir aplicando prácticas que no favorecen la democracia y la libertad del voto.
Incluso, ironizó con la negativa de PRI, PAN y PRD de aprobar el dictamen de la reforma electoral que implica cambios a 17 artículos de la Constitución.
“No se le puede quitar dinero a los partidos. ¡Aplausos! Van a seguir siendo los partidos los que por órdenes de sus jefes nombren a los consejeros y a los magistrados del Tribunal Electoral, no los ciudadanos, no el pueblo”.
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