El Congreso local tiene en sus manos una iniciativa que busca frenar esta actividad y que fue aprobada en comisión; sin embargo, la discusión fuerte está apenas por venir.
Elsy Cerero
La Comisión de Bienestar Animal del Congreso de la Ciudad de México aprobó ayer lunes una iniciativa que podría prohibir las corridas de toros, igual que ocurre en Sonora, Coahuila y Guerrero.
Se trata de un proyecto impulsado por el Partido Verde que se opone a “espectáculos públicos, en los cuales se maltrate, torture o prive de la vida a los toros, novillos y becerros”.
Esto es lo que se sabe hasta ahora:
¿Hay antecedentes de esto?
Desde el 22 de marzo de 2012 se ha intentado frenar esta actividad. En la entonces Asamblea Legislativa, el Verde ha impulsado proyectos argumentando trato cruel contra los animales; sin embargo, hay muchos intereses, principalmente económicos, que no han permitido que esto avance.
¿Qué dicen las organizaciones protectoras de animales?
Desde ese mismo año, la Sociedad Mundial para la Protección Animal (WSPA, por sus siglas en inglés) entregó a la Asamblea Legislativa más de 23 mil firmas de personas de todo el mundo para respaldar la abolición de las corridas de toros.
De acuerdo con un estudio de la WSPA y la Fundación Tomy, en ese entonces en México morían cada año unos mil 400 toros en las 175 corridas que se llevan a cabo en el país.
¿Qué costo implicaría?
Empresarios del ramo, como Rafael Herrerías, afirman que tan sólo en la Plaza México el espectáculo taurino implica mil 200 empleos directos, más los indirectos, lo que representaría pérdidas millonarias para este sector.
¿Qué se necesita para que se apruebe la iniciativa?
Que la mayoría de los legisladores se ponga de acuerdo. Lo que pasó este lunes es solo un primer paso, pero al parecer no está bien dado. El vicecoordinador del congreso local, el perredista Jorge Gaviño, considera que no pasará al pleno el dictamen, pues fue aprobado en la comisión con solo cuatro votos a favor, lo que fácilmente podría ser impugnado, además de que falta el consenso de Morena, partido mayoritario.
“Todos los votos debieron ser en pro del dictamen, así lo indica el artículo 106 del Reglamento del Congreso Local. Dice que el dictamen deber contar con el voto aprobatorio de la mayoría absoluta de las y los diputados de las comisiones que dictaminan”.
El siguiente paso sería en el pleno del Congreso local de la Ciudad de México, donde habrá de formalizarse la discusión entre todos los partidos políticos representados.
¿Qué incluye la iniciativa?
Multas para quienes recurran a estas prácticas, que rondarán entre las 27 mil 500 y 55 mil Unidades de Medida y Actualización (UMA), lo que se traduce en un pago de casi cinco millones de pesos.
¿En qué países están prohibidas las corridas de toros?
Las corridas de toros han sido prohibidas en varios países, ciudades y comunidades. En España, por ejemplo, no están permitidas en Asturias, Andalucía, Canarias y Cataluña, lo que ha sido considerado por legisladores y organizaciones defensoras de animales como “un hito histórico sin precedentes”, desde que en 1991 inició la ola en Canarias y se extendió por casi todo el país.
En Ecuador, las corridas de toros han sido consideradas un espectáculo público de tortura a animales indefensos, así que están prohibidas en Quito, la capital. En Francia, han sido proclamadas antitaurinas las ciudades de Mouans-Sartoux, Montignac, Bully-les-mines y Joucou. En tanto, Perú aprobó una ley que prohíbe el maltrato y el sacrificio animal en espectáculos públicos y privados, incluyendo las corridas de toros.
Desde 2008 están prohibidas también en Medellín, Zapatoca y Bello, las tres ciudades de Colombia, y Carrizal y Caracas, en Venezuela. En febrero de 2009, Viana do Castelo, en Portugal, se declaró antitaurina.
¿Qué pasa con México?
México se ha sumado desde 2013 a la ola antitaurina. Ese año, Sonora decidió desterrar las corridas de toros, un año después ocurrió en Guerrero y para 2015 se sumó Coahuila; sin embargo, el panorama es complicado en estados como Aguascalientes, Querétaro, Tlaxcala, Hidalgo, Guanajuato, Michoacán y Zacatecas, donde esta actividad es considerada Patrimonio Cultural Inmaterial.