La posibilidad de reelegirse definirá la labor legislativa de diputadas y diputados federales en el próximo periodo de sesiones, advierten especialistas.
Claudia Téllez y Rita Cerón
A pesar de tener una agenda legislativa abultada para cerrar su último periodo legislativo de sesiones, la Sexagésima Cuarta Legislatura del Congreso de la Unión corre el riesgo de dejar de lado temas prioritarios por el contexto electoral marcado por la reelección de los diputados.
Senadores y diputados, en sus trabajos deberán incluir temas impulsados por el presidente Andrés Manuel López Obrador, como regular la subcontratación laboral.
También, mandatos judiciales para regular el uso de la marihuana o impulsados por la mayoría, como la Ley al Banco de México, y pendientes como las Leyes General de Educación Superior, de la Fiscalía General de la República, de Ciencia, Tecnología e Innovación, tipificar como delito el odio racial y establecer que el aumento al salario mínimo nunca este por debajo de la inflación.
Especialistas e investigadores coincidieron que los legisladores tendrán que coadyuvar para atendar los problemas que enfrenta el país, derivados de la pandemia por Covid-19 y la crisis económica, lo cual obligará a una reforma fiscal.
Para Roberto Rodríguez, investigador de la UNAM, el periodo de sesiones, que inicia del 1 de febrero y concluye el 30 de abril, tendrá una lectura electoral y se correrá el riesgo de que los legisladores dejen de lado temas impopulares, para no afectar sus aspiraciones políticas.
Desde su punto de vista, los legisladores deben concretar una reforma fiscal para compensar los ingresos del erario, a fin de que haya recursos para los programas prioritarios.
«Entonces si, en lo definitivo, los diputados tendrán que calcular las leyes que puedan aprobar o no aprobar en función de su impacto electoral, no sólo los diputados principalmente el Ejecutivo. Digamos leyes impopulares podrían tener costos electorales, eso es muy sencillo de entender, pero hay una serie de reformas que tendrán que ser debatidas en el Congreso porque son urgentes.»
Edgar Ortiz, politólogo y catedrático de la UNAM, coincidió que diputados y senadores primero deben sacar la agenda que quedo pendiente y los temas que se acumulen en los primeros meses de 2021.
«Primero que saquen toda la agenda legislativa que quedó pendiente para el 2020, hay una serie de temas que no se resolvieron en particular en la Cámara de Diputados. Estamos hablando del tema del uso de la marihuana; del aumento salarial que está ahorita causando bomba; de Banxico, que desato gran polémica porque pone en riesgo toda la economía nacional; está el tema de remuneración, que tampoco se ha resuelto con claridad; también el Outsourcing, que está en un proceso de negociación con los sectores empresariales.»
Roberto Rodríguez consideró que no habrá parálisis legislativa por las campañas electorales para diputados, que serán del 4 de abril al 2 de junio, pues los temas pendientes deben transitar.
«Los temas que están pendientes de una o de otra manera tienen que transitar, sí creo que pueda haber una precaución adicional a reformas que son importantes, a la ley del trabajo, en materia económica y fiscal, creo que ahí se van a andar con pie de plomo pero son reformas que sin duda estarán en el tapete de la discusión.»
Roberto Rodríguez, investigador de la UNAM
Edgar Ortiz, vislumbró el riesgo de que los diputados y senadores estén más preocupados por las campañas electorales.
«El gran riesgo es que vamos a ver que muchos legisladores, debido al derecho que tienen de reelegirse, se van a preocupar más por mantener su curul que realmente responder a las necesidades de la agenda legislativa.»
Edgar Ortiz, politólogo y catedrático de la UNAM
Sin embargo, señaló que las tareas legislativas deben continuar porque hay temas prioritarios para el presidente de la República, como la regulación del outsourcing. Enfatizó que, si éstos no salen, provocarán la molestia del Ejecutivo con el Congreso.
«Lo que probablemente vamos a ver es un presidente molesto con su congreso, si es que no le aprueban las iniciativas que a él le interesan de manera rápida. No creo que este en riesgo la gobernabilidad del país, pero si puede haber una parálisis que debilite y el principal afectado va a ser el gobierno federal.»
Para la presidenta de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, la priista Dulce María Sauri Riancho, el reto principal que la legislatura enfrentará, en su último periodo de sesiones, es combinar el trabajo parlamentario y las campañas electorales.
Y es que, por primera vez, los diputados federales tendrán la posibilidad de buscar la reelección, sin solicitar licencia al cargo.
«No será distinto; sin embargo, hay un elemento nuevo, y es la posibilidad de la reelección consecutiva. ¿Cuántos diputados vayan a optar por la elección consecutiva? Yo creo que lo vamos a saber hasta finales de marzo en forma cierta, porque es hasta entonces cuando los partidos políticos tienen la obligación de registrar las candidaturas a diputados federales.»
De ahí que, dijo, el reto es mantener la gobernabilidad de la Cámara de Diputados.
«El reto principal tiene que ver con la gobernabilidad de la Cámara, es decir que tenemos que hacer un esfuerzo grande los órganos de gobierno para que el periodo de sesiones, sea productivo, sea un periodo en el que el trabajo legislativo se desarrolle, tal como nos obliga la ley pero también la responsabilidad política que tenemos como integrantes del Poder Legislativo. Esa es una parte muy relevante y muy compleja que tenemos por abordar.»
Por su parte, el presidente de la Junta de Coordinación Política y coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, advirtió que el trabajo se mantiene e incluso la presentación de iniciativas, como la Ley del Banco de México, que incomodan a muchos.
«Seguiré presentándolas. Estoy preparando otras, que se van a molestar también. Lo advierto, pero pues ni modo. Es para bien de la Patria. También platicaré, eso sí, platicaré con todos, pero tengo ahí algunas que estoy preparando. Y ahora que no voy a salir de vacaciones, aquí voy a estar. Entonces voy a estar mucho tiempo redactando, investigando, leyendo, para poder presentar más iniciativas», recalcó.
Monreal Avila garantizó que los comicios para renovar la Cámara de Diputados y miles de puestos de elección popular en 30 entidades, entre ellas 15 gubernaturas, no paralizará el trabajo legislativo.
«No habrá parálisis legislativa. Vamos a separar muy bien el proceso político electoral del proceso legislativo. De eso nos vamos a encargar nosotros, todos los coordinadores, todos los senadores. Habrá quienes se vayan a hacer campaña, que les vaya bien, pero habrá quienes nos quedemos a seguir legislando.»
Ricardo Monreal, presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado
Por lo pronto, diputados y senadores, que ya reforzaron los protocolos sanitarios para continuar con sesiones semipresenciales y evitar contagios por coronavirus, se preparan para cumplir con la agenda legislativa en medio de una batalla entre partidos para buscar la mayoría en San Lázaro, por lo que se avecina una encarnizada lucha electoral.