En una breve audiencia, la jueza Carol Bagley Amon aceptó la petición del Gobierno de Estados Unidos para retirar los cargos contra el exsecretario de la Defensa Nacional.
Adriana Esthela Flores
La jueza de Brooklyn, Carol Bagley Amon, desestimó las acusaciones por narcotráfico y lavado de dinero contra el exsecretario de Defensa, Salvador Cienfuegos Zepeda, quien podrá volver a México y ser puesto en libertad.
Durante la audiencia, que se prolongó alrededor de 20 minutos, la jueza le preguntó al general si entendía el acuerdo para sacarlo de territorio estadounidense, a lo que el exfuncionario respondió “Sí, sí estoy de acuerdo”. La salida del exsecretario de la Defensa se realizará bajo custodia del Servicio de Alguaciles.
La audiencia inició con la exposición del fiscal del distrito este de Nueva York, Seth DuCharme, quien explicó que el gobierno de Estados Unidos determinó que el interés más amplio en mantener esa relación [con México] de una manera cooperativa supera los intereses del Departamento de Justicia en llevar adelante este caso”. Y añadió: “Continuar el juicio va en contra de los intereses de Estados Unidos, en particular la relación con México y los esfuerzos cooperativos que afectan el caso”.
La jueza preguntó si la solicitud para desechar la acusación fue tomada por el fiscal general de Estados Unidos, William Barr, a lo que DuCharme asintió. Entonces, la jueza determinó que no hay duda por parte de las autoridades estadounidenses de que el gobierno mexicano investigará a Cienfuegos Zepeda y actuará en consecuencia: “Es un asunto de política exterior, no tengo razones para dudar de la determinación del gobierno de que las autoridades judiciales mexicanas sinceramente desean avanzar en una investigación y posible procesamiento del acusado”.
Al cuestionarle a Cienfuegos si temía ser investigado por las autoridades mexicanas, el exsecretario respondió que no. De esta manera, el general, de 72 años de edad, será trasladado a México por integrantes del Servicio de Alguaciles de Estados Unidos.
Al llegar a territorio mexicano, estará libre de los cuatro cargos por los que fue detenido el pasado 15 de octubre en Los Ángeles, California: tres por narcotráfico y uno por lavado de dinero.
A través de un mensaje en sus redes sociales, la Secretaría de Relaciones Exteriores consideró que la decisión de la jueza Carol Bagley Amon «es una muestra de la solidez de la relación bilateral y la confianza del Gobierno de Estados Unidos en las instituciones de justicia mexicanas».
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