Jorge Zárate ha impulsado su carrera como boxeador gracias al apoyo de patrocinios de negocios en Iztapalapa y Estado de México. Conoce cómo ha sido su camino de la UNAM al boxeo profesional.
Da play y conoce la historia completa de Zárate. Con la producción de Uriel Gámez.
Juan Pablo Vilchis
“Ahorita le puse una pausa a la escuela. Iba a la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM. Estudiaba Comunicación y ahorita lo pausé por este sueño que es llegar a ser campeón del Mundo en el boxeo”.
Jorge Zárate es un joven pugilista profesional que se forjó en el deportivo Francisco I. Madero de Iztapalapa.
El capitalino de 26 años comenzó su carrera peleando en la división gallo, pero decidió bajar para hacerlo en súper mosca, categoría en la que lleva cuatro peleas, mismas que le fueron suficientes para posicionarse en el puesto número 14 de México en esa división, de acuerdo a BoxRec.
El camino no ha sido nada fácil: dejó sus estudios universitarios para trabajar y ayudar a sus padres a vender camarones. Pronto los gastos de las preparaciones para sus combates lo rebasaron y se vio en la necesidad de abrir una barbería en Los Frentes, uno de los barrios bravos de Iztapalapa: el lugar que lo vio crecer.
“Siempre los gastos de mis preparaciones han corrido por mi cuenta. Antes trabajaba en Expansión, ya no pudimos trabajar ahí y entonces estamos en la barbería y me ha dado para mantener mis gastos. Cuando uno no tiene ningún patrocinio la verdad es que sí es difícil y justo tener que trabajar para poder solventar los gastos que conlleva una preparación”.
Aún así, sus ganancias no son suficientes para costear todo lo que necesita, ya que tiene que pagar servicios necesarios para su buen rendimiento dentro del cuadrilátero:
“En el equipo está el nutriólogo César García, mi entrenador principal Alfredo Melo, su hijo Alan Melo que se encarga de la preparación física; también Diana Soza que es la psicóloga. Todos me cobran. Poco, pero me cobran. De la dieta, nutriólogo y suplementos me gasto cuatro o cinco mil pesos; más aparte vitaminas en las que me gasto otros quinientos pesos; con la psicóloga la consulta cuesta quinientos pesos; lo que conlleva los pasajes, una visita a algún gimnasio. Entonces, por preparación me he de gastar alrededor de ocho mil pesos; a parte los guantes que se me llegan a acabar y esos cuestan dos mil o dos mil quinientos pesos, la careta que vale igual como dos mil quinientos; los exámenes. Son todos esos gastos que se acumulan y se hacen”
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Ante la necesidad de remunerar a su cuadrilla, a Jorge se le ocurrió una idea: buscar patrocinios de los negocios locales. ¿Cómo?: a través de las redes sociales.
“De ahí surgió la idea de los patrocinios porque sí se hace un gasto en toda la preparación. Se buscaron para poder mantener los suplementos, la alimentación. Toda aquella cosa que me ayude para mejorar el entrenamiento. Los patrocinios han salido de las publicaciones que he hecho en Facebook. He aceptado la ayuda de cualquier persona porque creo que, mientras sume, cualquier ayuda es buena. Mientras gusten apoyarme es bien recibido y el intercambio es el apoyo por usar el logo en la pelea y hacer uno que otro post (de sus negocios) para echarnos la mano entre todos”.
Y no fue la publicidad lo único que les interesó a los negocios del barrio: además, los motivó el hecho de tener la oportunidad de impulsar a un boxeador de la misma comunidad, como los propietarios de la barbería “Barber Logan”, la familia Leyva Hernández.
“Independientemente de que el patrocinio es algo mutuo, para nosotros queda en segundo término. Por lo que nosotros decidimos patrocinarlo, es porque vimos que necesitaba exactamente un empujoncito y encontrar quién lo ayude de verdad”.
“Decidimos patrocinar a Zárate porque para nosotros es lo que importa: apoyar al deporte con personas como él, con ganas de triunfar y de ser un campeón exitoso en la vida”
¿ Y cómo conocieron a Zárate?
“Los dueños de la barbería me conocen desde hace ya tiempo. Mi papá vende mariscos en un puesto ambulante y por él es que me conocen en el Campamento de Los Frentes donde prácticamente nos conocemos todos y por lo mismo me conocieron a mi y han seguido mi carrera. Por eso es que tenemos esa conección”
También lo apoya Jorge Esparza, propietario de la carpintería “Muebles y Diseños Pakal”, aledaña a uno de los gimnasios en los que Jorge alguna vez entrenó en Nezahualcóyotl.
“Decidí patrocinar a Jorge porque quiero que mi marca llegue a las Vegas y veo en Jorge el camino más corto. Nos conocimos en un gimnasio entrenando, comenzamos una buena amistad, se dio la plática del patrocinio y aquí estamos con gusto apoyando”.
O el Doctor Erick Rojas de la clínica Santa Anita, quien es especialista en rehabilitación física, y también se unió al movimiento del pugilista para obtener patrocinios.
“Siempre he creído que a los jóvenes se les debe apoyar para alcanzar su potencial y yo creo en el potencial que tiene, por eso lo apoyo en el área médica y de rehabilitación física”.
De igual manera lo hace uno de sus mejores amigos y dueño de una vidriería, Daniel Lira.
“El poder ayudarlo como su amigo, en lo personal, me motiva. Realmente me motiva demasiado el poder ayudarlo y ver el crecimiento que él ha tenido día con día; ver el avance que ha tenido durante todo este tiempo que llevo conociéndolo. Eso ha sido una de las causas por las cuales yo decido apoyar a Zárate”
Zárate reconoce que a pesar de que no todos los negocios que lo han apoyado son de la zona en la que vive, al final esos patrocinios son producto de las relaciones sociales que ha construido en su colonia desde su infancia.
“Me estuvieron ayudando varios patrocinadores, entre ellos una mueblería que se llama Pakal, una barbería que se llama Barber Logan, el gimnasio donde entreno fuerza de Rojo Gómez, un licenciado que se apellida Vilchis, me ayuda una persona que se llama Saúl Gómez (de él usamos dos logos) y apenas se unió Joseph, un amigo de la universidad. Estoy muy agradecido con todos ellos porque su apoyo me ayuda a aligerar los gastos”
Ya con el cobijo de los pequeños negocios de la gente de su barrio, Jorge Zárate disputó sus últimas peleas… y logró llamar la atención de la promotora “The Warriors Boxing”, casa con la que debutó con victoria por nocaut el pasado 27 de enero, en el Showcenter Complex de Monterrey.
“Gracias a Dios ganamos en el segundo round y ahorita estamos esperando fecha. De hecho este promotor —el regiomontano Roberto Zarazúa— me dio la oportunidad de tener la pelea pasada con ellos porque me vio en otras funciones y como hicimos una buena actuación, pues ya nos vamos a quedar ahí trabajando con Warriors”.
Y aunque algunos comerciantes ya no han podido seguir con el patrocinio, Jorge está agradecido con cada uno de ellos por haberlo acompañado en el principio de su carrera.
“Así es como ha funcionado. Unos se han mantenido y unos que no, pero de todos modos yo estoy muy agradecido porque esto es de gran ayuda para mí”.
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