Para el colectivo Menstruación Digna México, la medida incluida en el Paquete Económico 2022 es un primer paso hacia una política fiscal igualitaria.
Asunción Cabrera
La posibilidad de una tasa cero a productos de gestión menstrual, como se propone en la miscelánea fiscal para 2022, es un primer paso hacia una política fiscal igualitaria, debido a que se podría acceder a productos de higiene menstrual a precios más bajos, de acuerdo con el colectivo Menstruación Digna México.
Ello significaría un primer paso para combatir la pobreza menstrual, que contempla el difícil acceso a productos de gestión menstrual –que actualmente tienen un sobreprecio con el 16% de IVA–, la falta de infraestructura para menstruar de manera digna y la falta de información sobre el tema.
La vocera del colectivo, Anahí Rodríguez, dijo que en este tema todavía hay varios pendientes en materia de regulación para que niñas, mujeres, adolescentes y personas menstruantes tengan acceso a esos productos.
“Hay un tema ahí pendiente en el Senado de un dictamen que se aprobó en la Cámara de Diputadas y Diputados para que justamente hubiera distribución gratuita de los productos en las escuelas públicas, básicas; entonces, no ha sido aprobado”.
Las problemáticas por las que atraviesan las mujeres al no poder acceder a productos de gestión menstrual son diversas. Según la UNICEF, en México 43 por ciento de estudiantes dejan de asistir a la escuela durante su periodo porque no cuentan con recursos para comprar productos sanitarios. Esto equivale a 20 por ciento de un año escolar.
El abandono escolar, los problemas de salud, la desigualdad y la pobreza menstrual, son una realidad para las mujeres con menos recursos económicos.
Otros productos con tasa cero son alimentos y medicinas, fertilizantes, revistas y periódicos y ahora estarían los productos de gestión menstrual, lo cual beneficiaria a todas las mujeres en edad reproductiva.
La legisladora Martha Tagle, quien presentó desde 2020 una reforma a la ley del IVA en productos menstruales, la cual no fue aprobada, dijo que se trata de un asunto de justicia fiscal para las mujeres.
“Los productos de gestión menstrual son asuntos de primera necesidad, no son un tema de lujo para las mujeres, y de acuerdo con propios datos y cifras que había presentado el año pasado la Secretaría de Hacienda, significa que las mujeres estamos pagando al rededor de tres mil millones de pesos por este impuesto”.
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