En 2017, el extitular de la Comisión Nacional de Búsqueda, Roberto Cabrera, vendió 45 mil perfiles genéticos a la empresa “Central ADN”.
Escucha nuestra conversación con Karla Quintana, comisionada Nacional de Búsqueda
Kayleigh Bistraín
La Comisión Nacional de Búsqueda de Personas nació en 2017 con un propósito: ayudar a la localización de miles de desaparecidos en México.
Su creación fue una tarea ardua de la sociedad civil y de las familias que buscaban a sus seres queridos.
Sin embargo, nadie imaginó que el primer titular de la Comisión, Roberto Cabrera Alfaro, traficaría con al menos una base de 45 mil perfiles genéticos para venderla a la empresa “Central ADN”.
A cinco años de este caso, un juez sentenció a Roberto Cabrera a tres años y nueve meses de prisión por este delito. No obstante, la sanción es mínima comparada con la acción que cometió.
Para actual titular de la Comisión Nacional de Búsqueda, Karla Quintana, todavía quedan varias preguntas sin resolver.
Una de ellas es saber qué ganaba Roberto Cabrera con vender esta información, principalmente, por el tipo de datos de los que se trataba.
Por ello, Karla Quintana exigió al juez que obligue a la Fiscalía General de la República a ampliar la investigación, pues aún queda pendiente una investigación.
“La denuncia la presentamos desde la Comisión Nacional de Búsqueda en agosto del 2019. La carpeta se dividió en dos y lo que se juzgó la semana pasada fue un hecho en concreto sucedido en 2017… “Quedan muchas dudas abiertas en la otra carpeta como ¿cuál es el beneficio que obtuvo (Rafael Cabrera)? ¿Cuántas entregas hubo? ¿Quién se beneficiaba desde el Estado y dónde podría estar circulando esta información?”.
Datos genéticos desconocidos
La Comisión Nacional de Búsqueda y la FGR desconoce los datos exactos que contenía la información entregada a la empresa privada.
Esa incertidumbre genera preocupación porque los 45 mil perfiles genéticos podrían contener nombres, edad, entre otros datos abiertos.
“No sabemos en qué manos puede caer, sin ningún convenio de por medio, sin ninguna protección de promedio”.
Una red de complicidades
La comisionada Nacional de Búsqueda duda que este caso sea un hecho aislado y que Cabrera Alfaro sea el único exfuncionario responsable, principalmente, porque no ocupaba un cargo de alto nivel.
Según las investigaciones, la entrega de la base de datos ocurrió cuando Roberto Cabrera todavía era coordinador general de Estrategias del Sistema de Seguridad Pública.
Una unidad de la entonces Comisión Nacional de Seguridad que estaba a cargo de Renato Sales, actual fiscal general de Campeche. Esto demuestra que tenía superiores que debieron enterarse.
“No consideramos que esto sea aislado. Se tiene que investigar a todas las personas funcionarias públicas de este gran entramado que lucraba y se beneficiaba del dolor de las personas desaparecidas que buscaba a sus familiares”.
Karla Quintana dejó en claro que el Estado mexicano puede contratar servicios privados para apoyar en labores de cruces de datos de perfiles genéticos.
No obstante, estos contratos deben contar con herramientas legales y jurídicas para proteger la información, clasificada como sensible.
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Comisión Nacional de Búsqueda vendió datos genéticos en 2017