La crisis económica derivada de la pandemia no solo ocasionó que seis de cada 10 mexicanos no tuvieran suficiente dinero para enriquecer la canasta básica, también provocará el cierre definitivo de entre 250 mil y 300 mil tienditas para fin de año.
Eduardo Quevedo
Guadalupe representa otra perspectiva de cómo la población mexicana vive las afectaciones económicas derivadas de la pandemia. Ella, más que no poder adquirir la canasta básica, es quien apenas obtiene ganancias en su tiendita.
Al igual que su negocio, fiar y las bajas ventas se han convertido en las constantes de la mayoría de los pequeños comerciantes.
“Sí, a veces si les he prestado, pero solo a los clientes más conocidos, porque uno no puede estarle prestando a todo aquel. Qué más quisiera yo que prestarles, pero a veces no se puede porque aquí también lo poco que obtenemos de diario de ganancias es para estarle dando vueltas y que no nos falte nada. Y pues tener toda la mercancía para el cliente. Imagínese si no la surtimos los clientes se van y de por sí, así como estamos en esta situación».
Guadalupe, comerciante local
De acuerdo con datos de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes, ocho de cada 10 tienditas han fiado mercancías a sus clientes durante la contingencia.
Además, siete de cada 10 registraron una caída de ventas de entre el 30 por ciento y 50 por ciento, y desde marzo casi la totalidad no registra ganancias.
La encuesta realizada por la ANPEC también arrojó datos que no auguran un buen inicio de año económico para el 2021. De los comerciantes encuestados, el siete por ciento dijo que están a punto de cerrar definitivamente sus negocios, lo que equivale a entre 250 mil y 300 mil tienditas.
Los bajos ingresos en estos pequeños negocios no son más que el reflejo de la misma problemática en sus clientes. Según datos de la encuesta “EnCovid-19” realizada por el departamento de Investigación con Impacto Social de la Universidad Iberoamericana, el 65.1 por ciento de los hogares del país vieron reducidos sus ingresos desde el inicio de la cuarentena y, al cierre de mayo, una de cada tres familias reportó una reducción de 50 por ciento o más en los mismos.
En un escenario en el que las posibilidades de comprar y las oportunidades de vender se han visto reducidas, en México sólo el 36 por ciento de la población alcanza el nivel de seguridad alimentaria, condición donde existen los recursos necesarios para adquirir alimentos de calidad.
El otro 64 por ciento enfrenta inseguridad alimentaria leve, moderada o grave; condición donde la gente cuenta con menor cantidad y calidad de alimentos, por falta de recursos económicos.
Así lo comentó a IMER Noticias, Graciela Teruel directora del Instituto de Investigaciones sobre Desarrollo Sustentable y Equidad Social.
“Esta pandemia ha traído consecuencias económicas muy grandes para muchos hogares, sobre todo para hogares de menor nivel socioeconómico. Entonces está siendo complicado, como lo estamos viendo en todos los indicadores de seguridad alimentaria, está siendo complicado para un porcentaje importante de la población de la Ciudad de México acceder a alimentos en todo momento. Entonces pues eso es parte de las estrategias que siguen algunos hogares para poder tener acceso a alimentos, piden fiado y algunos otros no necesariamente solo en la capital sino lo que estamos encontrando a nivel nacional es que algunos hogares están endeudándose, otros están dejando de pagar tarjetas de crédito y están siguiendo distintas estrategias para hacer frente a esta crisis”.
Graciela Teruel directora del Instituto de Investigaciones sobre Desarrollo Sustentable y Equidad Social
Ante esta situación, el presidente de la ANPEC, Cuauhtémoc Rivera, considera que es necesaria la voluntad política para apoyar tanto a comerciantes como a la población en general y así poder regresar a un flujo económico.
«Estamos por llegar a un momento muy crítico, la gente está localizada a garantizar el consumo básico del hogar y no hay que desesperar, no hay que encajarse y tener mucho cuidado con campañas como la del Buen Fin y en lugar de comprar algún bien lo que estamos haciendo es comprar un dolor de cabeza para el hogar porque al rato no vamos a poder pagar esa deuda […] se acabó el dinero y no hemos controlado la pandemia o hay muy poco dinero circulando y la pandemia aún no se controla y hay que entender esa realidad».
Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes
Pese a su expectativa por una reactivación económica, Rivera llama a la población a no endeudarse en un escenario en el que el dinero se acaba y la pandemia no.
«Estamos por llegar a un momento muy crítico la gente está localizada a garantizar el consumo básico del hogar y bueno no hay que desesperar, no hay que encajarse y tener mucho cuidado con campañas como la del Buen Fin y en lugar de comprar algún bien lo que estamos haciendo es comprar un dolor de cabeza para el hogar porque al rato no vamos a poder pagar esa deuda. Este se acabó el dinero y no hemos controlado la pandemia o se nos está acabando el dinero o hay muy poco dinero circulando y la pandemia aún no se controla y hay que entender esa realidad».
Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes