“Si nosotros limitamos la interacción social, la cantidad de reuniones a las que asistimos de manera no esencial, vamos a poder garantizar y controlar el nivel de casos y cortar las cadenas de transmisión”, estas fueron las palabras de Jorge Baruch Díaz, vocero de Covid-19 de la UNAM, ante la posibilidad de rebrotes en algunos estados.
Redacción IMER Noticias
A medida que el invierno se acerca en el hemisferio norte, los rebrotes de Covid-19 comienzan a aumentar. Es el caso de Europa, que desde hace más de un mes los nuevos contagios no cesan y han llevado a los gobiernos a imponer medidas como toques de queda o cierres parciales de ciudades. En México, los contagios van a la baja en 20 estados, pero en ocho se asoma la posibilidad de aumentos de infecciones.
Así lo informó Jorge Alcocer, secretario de Salud, como parte de su comparecencia ante la Cámara de Diputados este jueves 22 de octubre. Las ocho entidades que están encendiendo las alarmas son Aguascalientes, Coahuila, Chihuahua, Durango, Hidalgo, Nuevo León, Querétaro y Zacatecas.
A nivel nacional el comportamiento es estable, dijo Jorge Baruch Díaz, vocero de Covid-19 de la UNAM en entrevista para la Segunda Emisión de IMER Noticias. Una comparación entre la quincena anterior contra la última quincena, de acuerdo con datos de Our World in Data, respaldados por la Universidad de Oxford, el país muestra una tendencia de meseta a la baja.
Entonces, ¿por qué se comienza a hablar de rebrote en México?
En las últimas semanas, las autoridades de salud han notado que en algunas entidades comienzan a aumentar el número de casos positivos diarios, lo que amenaza con perder la tendencia positiva y volver a un repunte de contagios.
Baruch Díaz, quien también es jefe de la Clínica del Viajero de la Facultad de Medicina, explica que la mitad del riesgo de transmisión del virus SARS-CoV-2, que causa la Covid-19, depende de la intensidad de interacción social.
Si nosotros limitamos la interacción social, la cantidad de reuniones a las que asistimos de manera no esencial, vamos a poder garantizar y controlar el nivel de casos y cortar las cadenas de transmisión.
Jorge Baruch Díaz, jefe de la Clínica del Viajero de la Facultad de Medicina
El médico recordó que la principal forma de contagio del coronavirus es el contacto de persona a persona. Mientras más personas se encuentren en el espacio público, habrá una mayor facilidad de transmisión.
El aumento de casos lleva a la necesidad de cerrar parcial o totalmente ciertas actividades, lo que juega en contra de la economía, de por sí maltrecha por los confinamientos estrictos de marzos.
Baruch es enfático al aclarar que las medidas de higiene personal y seguridad, como la sana distancia o el uso de cubrebocas, no van perder vigencia hasta no contar con una vacuna y tratamiento para el nuevo coronavirus.
En las siguientes semanas se prevé que gran parte de los países del hemisferio norte registren un aumento en la intensidad de la transmisión comunitaria del Covid-19, continúa el médico, por lo que comenzarán a imponer de manera acelerada restricciones a la movilidad.
Esto ocasionará que el retorno de los viajeros internacionales sea difícil o la seguridad durante su estancia no sea la más óptima. Por eso el gobierno mexicano emitió una alerta preventiva de viaje para evitar hacer viajes al extranjero no esenciales, es decir, que no sean por negocios, visitas familiares y expatriados.
¿Cómo actuar un posible rebrote?
Baruch Díaz dijo que lo más importante es no caer en excesos, es decir, tener un balance entre lo que se puede y no hacer. En términos generales, recomienda reducir en lo posible la interacción social de tipo no esencial para evitar un nuevo confinamiento estricto y saturar la atención hospitalaria