Organizaciones de ciudadanos de la región oriental de Santa Cruz, uno de los bastiones de la oposición a Evo Morales, alistan una huelga para desconocer el triunfo del presidente y denunciar fraude electoral.
“Vamos a parar el país en forma indefinida”, dijo el líder cívico Luis Fernando Camacho en Santa Cruz, donde se darán cita representantes de organizaciones opositoras de todo el país para definir medidas contra el fraude.
Por su parte, el presidente Evo Morales convocó este martes a Embajadores y observadores de organismos internacionales en la sede del Gobierno en La Paz.
Con los conteos aún sin avanzar desde la noche del lunes, los resultados preliminares, con 95.63 por ciento de actas verificadas, daban a Evo Morales el 46 por ciento de los votos frente al 37 por ciento de su oponente Carlos Mesa.
Si Morales gana por más de 10 puntos, evita la necesidad de una segunda vuelta, lo que podría no lograr contra una oposición unida.
Sin embargo, al congelar la actualización de los votos se avivó la tensión.
Los medios nacionales mostraron imágenes de las oficinas del gobierno en llamas, mientras la Oposición y los partidarios de Morales se enfrentaban en las calles.
Mesa dijo que la autoridad electoral es un instrumento servil del gobierno y multitudes de seguidores respondieron a su llamado a la movilización.
La Organización de los Estados Americanos (OEA), que monitorea las elecciones, solicitó al organismo electoral que explicara por qué detuvo la transmisión de resultados preliminares y dijo que el análisis de la votación del domingo “claramente” mostraba que las elecciones se irían a una segunda vuelta.
