“Hoy es un día que quedará marcado en nuestra historia”: Pasión de Cristo declarada Patrimonio Cultural Inmaterial

La representación de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo en Iztapalapa fue inscrita por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Autoridades como la presidenta Claudia Sheinbaum y la alcaldesa Aleida Alavez celebraron la distinción, subrayando que esta tradición es un símbolo de identidad, cohesión social y vitalidad cultural para Iztapalapa y para México.

Escucha la entrevista con Aleida Alavez Ruiz, alcaldesa de Iztapalapa.

 Laura Velarde / Karen Ávila

En entrevista con Entrelíneas, la alcaldesa de Iztapalapa, Aleida Alavez Ruíz, celebró desde Nueva Delhi la decisión de la UNESCO de inscribir la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo de Iztapalapa en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, un logro que calificó como “un día histórico” para la demarcación y para la Ciudad de México.

 

Alavez destacó que esta distinción es el resultado de décadas de trabajo comunitario:

 

“Es un día histórico para Iztapalapa porque esto es producto de un trabajo de la comunidad, del comité organizador, de gobiernos anteriores y de la alcaldía. Hoy la representación de Semana Santa obtiene rango de patrimonio inmaterial de la humanidad.”

 

La alcaldesa recordó que el COSSIAC, integrado por los ocho barrios tradicionales del antiguo Atlalilco y Achomulco, es el corazón organizativo que ha mantenido viva la tradición por casi dos siglos.

 

La Pasión de Cristo: unión comunitaria y más de 2 millones de visitantes

 

Durante la conversación, Alavez subrayó que la representación atrae cada año a más de 2 millones de visitantes, lo que convierte a la Pasión de Cristo de Iztapalapa en el viacrucis más grande de México y en uno de los eventos culturales y religiosos comunitarios más importantes del mundo.

 

Señaló que el reconocimiento implica nuevas responsabilidades:

 

“Ahora vamos a trabajar en un plan de salvaguarda para garantizar que esta representación se haga cada vez mejor, con todo el acompañamiento que la alcaldía debe brindar.”

 

La alcaldesa aseguró que varios países expresaron interés en conocer más sobre la tradición y su organización comunitaria.

 

 

¿Qué significa el reconocimiento de la UNESCO para Iztapalapa?

 

La Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo en Iztapalapa —una de las tradiciones vivas más poderosas de México— ya es oficialmente Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. La UNESCO aprobó su inscripción y con ello reconoce una celebración que va más allá del acto religioso: es identidad, memoria colectiva y la fuerza organizativa de una comunidad que, desde hace más de 180 años, convierte sus calles en un enorme escenario cultural.

 

El Órgano de evaluación destacó no sólo el valor simbólico de esta representación, sino también el trabajo comunitario, el marco jurídico que la protege y las medidas de salvaguarda para asegurar su continuidad.

 

“La candidatura cumple con los criterios de inscripción y el Estado parte demuestra que es un elemento que trasciende la religión y constituye un símbolo de vitalidad cultural, de respeto, de búsqueda, de un bien común contribuye a el ejercicio de los derechos culturales y tiene un impacto positivo para la paz y la cohesión social.
Las medidas y salvaguardas se basan en un marco jurídico robusto y toma en consideración el objetivo de desarrollar y mejorar las condiciones de los sitios en los que tiene lugar esta representación.
El órgano de evaluación recomienda la inscripción de la representación de la pasión, muerte y resurrección de Cristo en Iztapalapa, en la lista representativa del patrimonio cultural y material o de la humanidad”.

 

 

Claudia Sheinbaum felicita a Iztapalapa y reconoce el esfuerzo comunitario

 

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, celebró el reconocimiento y felicitó a la comunidad que ha sostenido esta tradición.

 

“El día de ayer la UNESCO declaró como patrimonio inmaterial de la humanidad la Semana Santa de Iztapalapa. Es una actividad que tiene muchos años, la desarrolla un comité organizador de la Semana Santa, un comité comunitario social.
Los felicitamos a ellos, por supuesto, a ellas que ponen mucho empeño en esta celebración, a Clara, a Diego Prieto que ayudó mucho también como director de Lina a este reconocimiento que es muy importante para todas y todos los habitantes de Iztapalapa y todos los que son parte de esta gran celebración. Bueno, felicidades.”

 

Sheinbaum reconoció además el apoyo del antropólogo Diego Prieto, director del INAH, en el proceso de registro ante la UNESCO.

 

 

Un logro de la comunidad organizada

 

Por su parte, la alcaldesa de Iztapalapa, Aleida Alavez, resaltó que esta herencia cultural vive gracias a la devoción y unidad de generaciones. Sobre todo, un triunfo de la ciudadanía organizada, que ha preservado la tradición y consolidado una identidad colectiva que hoy recibe estatus global.

 

“Hay tradiciones que nacen en un territorio, crecen en el alma de su gente y cuando se comparten encuentran más espacios donde vivir y perdurar. Recordándonos que lo que se entrega con dignidad se fortalece. Que este reconocimiento honre a quienes generación tras generación han puesto cuerpo, voz y espíritu. Que haga ver al mundo que las expresiones nacidas del pueblo cuando se sostienen con devoción con historia y con unidad son capaces de convertirse en herencia universal”.

 

 

En entrevista para IMER Noticias, la alcaldesa destacó que el reconocimiento de la UNESCO también implica nuevas responsabilidades para garantizar la continuidad de esta tradición.

 

“Tenemos que hacer ya un plan de salvaguarda. Y esto implica que cada vez se haga una representación, pues con toda la atención, con todo lo que tenga que aportar. En este caso la alcaldía para llevarse a cabo de manera pues tan explícita, tan ardua como lo hacen cada año el comité organizador.

El gobierno es coadyuvante, pero es la población, la que se organiza, la que hace de esto algo que pues ya fue reconocido a nivel internacional”.

 

Cada año, miles de habitantes se involucran en ensayos, logística, vestuarios y preparación de escenarios. Más que una escenificación, es un esfuerzo comunitario y su candidatura fue impulsada por el Comité Organizador de Semana Santa en Iztapalapa A.C. (COSSIAC). Esta celebración que va más allá de lo religioso: es identidad, cohesión social y ejercicio de derechos culturales. Así lo expresó Juan de la Cruz Galicia, del Barrio de la Asunción en Iztapalapa y miembro del comité.

 

“El reconocimiento que se hiciera a la Semana Santa de Iztapalapa como patrimonio cultural y material sería transmitirle que en Iztapalapa no es más que amor, que es unión. Hemos tenido la fortuna de ir a platicar con otras entidades y darles a conocer lo que nosotros hacemos. En fin, de varias partes de la República vienen. Pues porque nosotros no nos cerramos al diálogo”.

 

Con su nueva inscripción en la UNESCO, la Pasión de Cristo en Iztapalapa confirma lo que su comunidad ha sabido siempre: que esta fiesta no sólo narra un pasaje religioso, sino que guarda la memoria, la creatividad y la identidad de todo un pueblo.

 

 

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