Después de más de una semana de combates, el ejército iraquí y las fuerzas kurdas están más cerca de la periferia oriental de Mosul, en Irak, la última ciudad que continúa en control del autodenominado Estado Islámico (EI).
Las autoridades iraquíes esperan que la ofensiva conjunta logre desalojar al grupo terrorista de la ciudad, lo que significaría una contundente derrota de los extremistas y los dejaría con muy poco territorio en Irak.
Sin embargo, el “EI” ha estado contraatacando fuertemente en el campo de batalla y en varias otras ciudades y pueblos, dañando incluso a la sociedad civil, usando métodos como:
- Ataques de distracción
- Flotas de coches bomba suicidas
- Túneles
- Escudos Humanos