La construcción de un muro para impedir el avance de los migrantes en Calais, Francia, ha sido objeto de crisis y disputas.
La alcaldesa Natacha Bouchart dispuso el pasado lunes detener la polémica edificación, alegando su impacto negativo en el urbanismo y el medio ambiente.
En septiembre comenzó la construcción de la pared dirigida a impedir el acceso de los migrantes a la carretera que conduce al eurotúnel, el cual cruza el canal de la Mancha y llega a Reino Unido.
El presidente francés Fancois Hollande explicó que Francia tiene un doble deber: “humanidad y firmeza, para aquellos que es pertinente el asilo, deben ser acogidos. Los que no deben ser reacompañados a la frontera” sentenció. Escucha más sobre el tema.