Las ha detectado principalmente como contrabandistas de hidrocarburos, que afectan la recaudación de impuestos y representan una competencia desleal.
La jefa del SAT, Raquel Buenrostro, en entrevista con Elia Baltazar.
IMER Noticias
El SAT ha puesto en la mira a grandes empresas informales que evaden impuestos, a través de diversos mecanismos como el contrabando de mercancías o la falsificación de documentos para declarar menos en las aduanas fronterizas.
Raquel Buenrostro, jefa del Sistema de Administración Tributaria, dijo en entrevista con IMER Noticias que se han detectado esquemas agresivos contra el fisco, que erosionan gravemente la recaudación y representan una competencia desleal para las empresas que sí pagan impuestos.
“Estos grandes contribuyentes del mercado informal son a los que nos queremos abocar y la manera en la que los vamos a agarrar es que, como son volúmenes tan grandes, tienen a toda costa que mover en transporte. Ya desde 2004 existían algunos controles en Comunicaciones y Transportes para estos movimientos y el Código Fiscal desde el 2012 hizo también una modificación para cobrarles un IVA a estos servicios. Lo que vamos a hacer es que estamos digitalizando la base del SAT y de Comunicaciones y Transportes para que nos sea más fácil identificarlos y poder detectar a todos estos grandes informales”.
Se trata de empresas que importan productos desde Estados Unidos, principalmente hidrocarburos, y recurren a estratagemas para evadir el pago correcto de impuestos.
De acuerdo con la jefa del SAT, para introducir mercancía a México se requiere de un documento conocido como pedimento en el que se detalla lo que se compró en el extranjero, lo que está declarando en la aduana y lo que está vendiendo en el territorio mexicano. Ese documento se digitalizará para que pueda ser revisado de la inmediatez.
“Por ejemplo, ahorita lo que ha estado muy en boga en las noticias es el contrabando de combustible. Nosotros observamos facturas que se emiten en Texas y dice que vendieron gasolina Premium, en la frontera declararon aceite de cetano, que no paga IEPS, y cuando entra a México la venden como gasolina Premium. Esta gente que está contrabandeando, esas grandes empresas, llegan a ofrecer el producto al consumidor final hasta en 50% menos. Si el precio del diésel anda en 20 pesos el litro, ellos lo llegan a ofrecer hasta en 10 o siete pesos; entonces no hay empresario formal que pueda resistir esa competencia desleal”.
También han detectado a distribuidores de gasolinas en México que no emiten facturas o que las condicionan al cliente a obtenerlas en un plazo de 24 horas, pues se trata de combustibles contrabandeados.
“Como esa mercancía entra de manera ilegal, cuando entra a las estaciones de servicio tampoco facturan y no pagan IVA. No sé si a muchos ciudadanos les pasa que cargan su gasolina en la gasolinería, les dan un ticket y les dicen que lo facturen en casa, pero sí se tarda más de 24 horas se cancela automáticamente, entonces esas facturas que cancela de manera unilateral la gasolinería no la está pagando, o sea, ahí tenemos que tener controles para la cancelaciones de facturas y son las cosas que estamos viendo”.
Agregó que lo que se busca es no dejarle toda la carga fiscal al contribuyente común y corriente, sino hacer que paguen las grandes empresas formales e informales que están afectando la recaudación de impuestos en el país.
Empresas pagan menos que asalariados
Raquel Buenrostro dijo que han identificado que las empresas pagan menos impuestos que los asalariados, debido a que al ser personas morales acceden a una serie de beneficios como la devolución de impuestos o deducciones.
Se ha calculado que las empresas pagan en promedio 1.3% de impuestos, mientras que una persona común llega a pagar hasta un 50%.
“Por ejemplo, una persona común y corriente que gana 7 mil pesos al mes pagó IVA en todo lo que consumió y aparte le descontaron su Impuesto Sobre la Renta, termina destinando prácticamente el 40% o el 50% de sus ingresos al pago de impuestos. Una persona moral tiene los ingresos, tiene los gastos, las deducciones, los beneficios fiscales, la posibilidad de una devolución, la posibilidad de un acreditamiento, etcétera, y termina pagando proporcionalmente el 1.3% en promedio”.
La jefa del SAT dijo que también en esto se va a trabajar, como parte de una política fiscal progresiva, que garantice el piso parejo y genere una percepción de justicia fiscal.
Agregó que México debe llegar a los estándares mundiales en los que el que gana menos paga menos porque destina una mayor proporción de sus recursos a la subsistencia del día al día.
En esta tarea, indicó, los municipios y estados tienen una gran responsabilidad, al cobrar correctamente sus propios impuestos locales, como el predial y el agua, que son los que menos se pagan en México.