El presidente López Obrador dijo que los diez mandatarios de la Alianza Federalista ejercieron su libertad y sus derechos; se dijo respetuoso del derecho a disentir y de las diferencias a su gobierno.
Guadalupe Franco
Luego de la salida de diez mandatarios estatales de la Alianza Federalista de la Conferencia Nacional de Gobernadores, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que esto es parte de la democracia y del ejercicio de los derechos y libertades.
En su conferencia matutina, el presidente se dijo respetuoso del derecho a disentir y de las diferencias a su gobierno, por lo que aseguró, no ve nada extraño en la decisión legítima que tomaron los gobernadores.
Asimismo, rechazó que su gobierno sea una amenaza a la democracia como lo afirmaron los gobernadores estatales o incluso algunos medios de comunicación, que dijo, pertenecen a grupos conservadores.
López Obrador aseguró que contrario al sistema autoritario que se llevó a cabo en administraciones pasadas, en su gobierno se trabaja por una verdadera democracia.
El presidente López Obrador consideró que las protestas de grupos feministas y la toma de las instalaciones de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos fue exagerada por medios de comunicación para dañar a su gobierno.
Aseguró que el caso para demandar justicia en temas de feminicidio ya se convirtió en un asunto político, derivado del encono y coraje que generó entre los conservadores la designación de Rosario Piedra al frente de la CNDH.
El presidente criticó que se esté sacando “raja política” del sufrimiento del pueblo como en “tiempos de zopilotes”.
Asimismo, señaló que pese a la disposición al diálogo de la Secretaría de Gobernación y la CNDH, los grupos feministas se niegan a dialogar.
El presidente reiteró su posición en contra de la violencia, al destacar que nunca antes se había visto la toma de las instalaciones de la CNDH sin la intervención de la policía para desalojar a los manifestantes, como ocurría en otros tiempos.
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