Durante cuatro sexenios, México ha exigido a Estados Unidos controlar el tráfico ilegal de armas de fuego que, según cálculos, suman aproximadamente 2 millones en los últimos 10 años. Los expertos afirman que cada hora 22 armas de fuego entran a territorio mexicano de manera ilegal.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador replanteó la estrategia y busca congelar de manera definitiva su tráfico.