Más de 100 mil personas firmaron una carta para sensibilizar a los panelistas del T-MEC sobre las consecuencias negativas del consumo de maíz transgénico.
Natalia Matamoros
Más de 100 mil personas firmaron una carta colectiva de las organizaciones Alianza por la Salud Alimentaria y Demanda Colectiva Maíz. El propósito del documento es sensibilizar a los panelistas que deliberarán sobre la controversia que solicitó Estados Unidos contra la prohibición de México del maíz transgénico.
Entre los firmantes se encuentran trabajadores del campo, miembros de la sociedad civil, académicos ambientalistas y expertos en nutrición.
Las organizaciones intentan que los panelistas Hugo Parezcano Díaz, Jean Kalicky y Christian Háberli, escuchen la opinión de la sociedad sobre las posibles consecuencias negativas para la salud pública y el medio ambiente el consumo de maíz genéticamente modificado y tratado con glifosato. Según la Organización Mundial de la Salud, este herbicida tiene alta probabilidad de ser cancerígeno.
Carlos Ventura, promotor de la campaña “Sin maíz no hay país“, informó que las audiencias programadas para el 27 y 28 de junio en México serán cruciales. Durante estas fechas, los panelistas escucharán las opiniones de ambos gobiernos y se espera que también consideren el punto de vista expresado por la ciudadanía a través de la carta colectiva.
La carta aboga por la siembra del maíz nativo, la soberanía alimentaria de los pueblos originarios mexicanos y la prohibición del maíz transgénico.
“De tal relevancia es el tema que, evidentemente, hacemos un llamado a los expertos, a los Estados, a las dos partes de los Estados que están en esta controversia, que es México y Estados Unidos, a que tomen en consideración los argumentos que presentamos en la carta”.
Incertidumbre sobre un riesgo para el ambiente
La importación de productos agrícolas forma parte del Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). Sin embargo, Gabriela Guzmán, abogada de la organización Poder del Consumidor, pidió no dejar de lado las implicaciones negativas a los derechos a la salud, alimentación y medioambiente.
“Tanto por Argumentos jurídicos, que han sido puestos ante el panel en opiniones de la sociedad civil como por argumentos principalmente de la defensa de México que no debe dejar de considerar ese plan, uno de ellos es el principio de precaución. El principio de precaución considera que ante la incertidumbre sobre un riesgo al ambiente, pues deben tomar medidas para prevenirlo, no debemos esperar, que estos días no sucedan para realizar alguna acción y qué es lo que ha hecho el Estado mexicano y que sea controvertido en ese panel.”
En representación de la Asociación de Empresas Productoras del Campo, Josefina Rosas, expresó preocupación por la pérdida anual de aproximadamente 300 mil empleos en el campo mexicano.
Según su punto de vista, la mayoría de los trabajadores agrícolas se trasladan a las grandes ciudades o emigran a Estados Unidos. Esto al considerar que la actividad agraria ya no es viable debido a las condiciones precarias en que trabajan.
Rosas también destacó la exposición de muchos jóvenes productores al crimen organizado. Por ello, enfatizó la importancia de que el Estado, en colaboración con organizaciones agrícolas y de la sociedad civil, trabajen para fortalecer el sector agrícola. También que permitan erradicar la dependencia alimentaria.
“Campo es importante la autosuficiencia alimentaria, es importante y sobre todo es importante la soberanía alimentaria, no olvidar que la soberanía alimentaria implica finalmente que nuestro país pueda producir todos los alimentos que requiere en la manera en que los necesita y eso no implica dejar de comercializar con otros países, simplemente que esos tres puntos dos millones de personas necesitan una atención diferente no hay país desarrollado que pueda existir o que pueda desarrollarse solamente.”
Se estima que en noviembre los panelistas tomen una decisión sobre esta controversia. Según expertos, la decisión a favor de México es crucial para preservar la autosuficiencia alimentaria y la diversificación de 59 especies de maíz que se producen en el sur y occidente de este país.
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