Si no cambiamos, esto se va a mantener, afirmó el presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal, José Antonio Ortega Sánchez.
Escucha la conversación con José Antonio Ortega Sánchez.
Redacción IMER Noticias
Tras la publicación de los resultados del Ránking 2020 de las 50 ciudades más violentas del mundo, elaborado por el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal, el presidente de esa organización, José Antonio Ortega Sánchez, sostuvo que tiene que haber un cambio en la política pública instrumentada por el gobierno federal para que México deje de ser el epicentro mundial de la violencia.
«Consideramos que la política pública implementada por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador no es la adecuada, que tiene que haber un cambio, para que nosotros podamos disminuir esta violencia y poder ir sacando algunas ciudades de este horroroso ránking.»
Ortega Sánchez comentó que, por cuarto año consecutivo, una ciudad mexicana es la más violenta del mundo e insistió en que, si no cambiamos la política pública, esto se va a mantener.
«En 2019 y 2020 hemos tenido 19 y 18 ciudades en este ránking de violencia homicida. Y los homicidios dolosos los tenemos en varias partes del país donde prácticamente pareciera que están en guerra por el número de homicidios por 100 mil habitantes que se están cometiendo.»
En 2020 la ciudad mexicana más violenta del mundo fue Celaya, Guanajuato. Y entre las primeras 10 aparecen también Tijuana, Ciudad Juárez, Irapuato, Ciudad Obregón, Ensenada y Uruapan.
El estudio incluye ciudades con más de 300 mil habitantes y que tienen la mayor cantidad de homicidios dolosos por cada 100 mil personas.
El presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal destacó que las ciudades principales de Guatemala y El Salvador han logrado salir de este ránking, cambiando la política que han implementado desde sus gobiernos federales.
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