Jovenel Moïse fue asesinado por hombres armados que irrumpieron en su residencia. En el ataque resultó herida la primera dama, Martine Moïse.
La internacionalista Yadira Gálvez, en entrevista con Paty Betaza.
IMER Noticias
Para la internacionalista y académica de la UNAM, Yadira Gálvez, el asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moïse, es un episodio que deja incertidumbre no sólo en ese país caribeño, sino en el ámbito internacional.
Dijo que Haití atraviesa por una fuerte crisis económica, política y social, además de la inestabilidad marcada por la presencia de bandas criminales que se apoderaron de las calles y que ha hecho emigrar a muchas familias haitianas.
“Me parece que nadie se esperaba un final de esta naturaleza para el presidente. Si bien había un problema severo de crisis de inseguridad en el país que ya se había repetido, protagonizado por pandillas o bandas criminales, que había incrementado la violencia en las calles, no se veía este escenario en el sentido de la propia protección que tiene todo mandatario todo jefe de Estado y esto genera una incertidumbre tremenda, tanto en la población en general como en la comunidad internacional, respecto a qué es lo que va a pasar con el país, en manos de quién va a quedar el gobierno y cómo se va a poder dar cauce a este vacío institucional que en este momento existe”.
Haití, que recibe la noticia del asesinato de su presidente la mañana de este miércoles, está en estado de sitio, lo que significa que las fronteras están cerradas, el aeropuerto está cerrado, se aplica la Ley Marcial y las fuerzas del orden están a cargo de las acciones para estabilizar al país.
El impacto internacional de este suceso se ve marcado, principalmente, por la alerta en la que está República Dominicana, el país vecino, que ha cerrado sus fronteras ante alguna eventualidad, como la migración masiva de personas.
“Los mandatarios de la comunidad internacional han expresado su consternación y el repudio al magnicidio, pero en particular el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ya dio a conocer un primer comunicado donde señala su solidaridad con el país y es muy probable que el primer ministro de Haití solicite el apoyo para una nueva misión de estabilización o algún tipo de apoyo que se les pueda otorgar desde la comunidad internacional ante la crisis que vive este país caribeño”.
El magnicidio en Haití
Jovenel Moïse fue asesinado por hombres armados que irrumpieron en su residencia, ubicada en Puerto Príncipe, la capital haitiana.
En el ataque resultó herida la primera dama, Martine Moïse, quien fue trasladada a un hospital para ser atendida.
El primer ministro interino, Claude Joseph, condenó el ataque, al calificarlo de “acto atroz, inhumano y bárbaro” y aseguró que la policía y el Ejército mantienen el orden en el país.