Hay mujeres purgando condenas de hasta 45 años de prisión por el delito de homicidio.
Escucha aquí la columna de Ezra Alcázar.
IMER Noticias
Al cuestionarse ¿cuántas mujeres han sido criminalizadas en México por abortar?, la periodista Luciana Wainer descubrió otra realidad en México, así lo plasmó en su libro Fortuito: El otro lado de la criminalización del aborto en México.
Es el título que este viernes nos trae el periodista y escritor, Ezra Alcázar, en su “Lectura a Fondo”, con el que pone en tela de juicio si el derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo, es un hecho en nuestro país o solo está en la letra.
“A la hora de estar explorando, Luciana, cuántos o quiénes eran las personas que habían sido detenidas o juzgadas por hacer un aborto, descubrió que la gran mayoría eran hombres y siempre estaban ligados con alguna cosa de haber participado en el aborto, ya sea en un procedimiento médico, algún tipo de violencia o el asesinato de una mujer embarazada, pero no llegaban a muchos”.
A través de la asociación civil “Las libres” la autora descubre que sus cifras no coincidían con los datos oficiales, puesto que “formalmente muchas de esas mujeres no habían sido detenidas y juzgadas por haber abortado, sino por delitos relacionados.
“Ahí empiezan a mezclarse una cantidad de trampas legales de los poderes judiciales que siguen enclavados en una criminalización de las mujeres que, no solamente, deciden abortar, sino que terminan abortando por diferentes situaciones”.
Es entonces cuando la periodista empieza a documentar y reconstruir, a través de testimonios, entrevistas, expedientes y datos, las historias de cinco mujeres encarceladas tras un aborto espontáneo, un parto fortuito, una emergencia obstétrica, pero sentenciadas a condenas severas de hasta 45 años de prisión, por homicidio u homicidio en razón de parentesco.
Ante esta realidad, Ezra Alcázar insiste en que el derecho de las mujeres al aborto no se ha conseguido, dado que “el sistema sigue funcionando de una forma en donde las mujeres siguen sin poder decidir sobre su cuerpo”.
“Es una realidad que vive nuestro país, hay muchos derechos que pareciera que hemos ganado, pero que hay que hacer una transformación dentro de los poderes judiciales, dentro de las fiscalías, para que esos derechos que se supone que tenemos estén garantizados”.
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