Bajo la consigna de que “no fue accidente”, manifestantes salieron a las calles a pedir justicia por la muerte de Debahni Escobar.
Perla Miranda
Con pequeños ramos de flores blancas, amarillas y lilas, alrededor de mil 500 personas salieron a las calles de la Ciudad de México para exigir justicia por la joven Debanhi Escobar, por mujeres desaparecidas y víctimas de feminicidio.
A las 3 de la tarde, colectivas que salieron de la Estela de Luz unieron sus pasos a los del contingente reunido en el Monumento a la Revolución para ir al búnker de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México. Brazos envueltos en pañuelos morados y verdes levantaron pancartas con leyendas como: “Debahni no cayó, la mataron”, “Hoy grito por ti, por mi, por todas” y “No estamos solas”.
#AlMomento || Mujeres se caminan de la Estela de Luz rumbo a la antimonumenta de Paseo de la Reforma para exigir justicia por #DebanhiEscobar, las desaparecidas y los feminicidios en México.
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— IMER Noticias (@IMER_Noticias) April 24, 2022
En el cruce de Balderas y Chapultepec, la marcha se detuvo, Rocío Reyes aprovechó el silencio y contó que el sábado pasado su prima Kathy estaba viva, que fue a una fiesta familiar y luego la asesinaron en su casa. Hace un año, un vecino se metió al departamento de Kathy e intentó estrangularla, fingió estar muerta y después denunció; a su agresor no le pasó nada. A una semana, Rocío señala que las autoridades no han sido de ayuda, por lo que emprendieron una campaña en redes sociales para pedir justicia por su prima.
“Exijo a las autoridades que nos ayuden y que detengan al homicida, necesitamos justicia, porque no solo estamos haciendo justicia por Kathy, haríamos justicia por muchísimas mujeres. Le exijo a las autoridades que modifiquen sus leyes, sus leyes no nos funcionan, sus leyes nos dejan que nos maten, protegen a los asesinos, las leyes de México no nos sirven a las mujeres, no nos funcionan”.
Minutos después, la marcha llegó a una Fiscalía blindada con vallas azules, en respuesta; una y otra vez retumbó el grito de ¡Justicia! mientras algunas mujeres pegaban fichas de búsqueda en el muro metálico. El contingente avanzó por Dr. Lavista, frente al edificio de la Jefatura General de la Policía de Investigación, Adrián Rodríguez Giles levantó la pancarta con la fotografía de su esposa Sandra Hernández, quién desapareció hace doce días.
“Mi esposa desapareció el 12 de abril, a la 1 de la tarde que iba para su trabajo, la fui a recoger a las 10 y no se presentó en su trabajo. La fiscalía está diciendo que cuando tengan noticias ellos nos van a avisar, pero no hemos visto nada de noticias, pero ya es preocupante para la familia, para sus hijos, para uno, por eso estamos en esta marcha. Yo pido a la justicia nada más que haga su trabajo, que nos dé respuestas”.
Como símbolo de abandono hacia las mujeres, los manifestantes se dirigieron al edificio de la ex fiscalía de Feminicidios de la CDMX; ahí familiares de mujeres desaparecidas y de víctimas de feminicidio contaron sus historias, denunciaron abusos de autoridades, irregularidades en las investigaciones y lamentaron que en el país se nacionalice al litio para “protegerlo” y las leyes no respalden a las mujeres.
“Para nosotros es una total burla lo que hacen por parte de las autoridades, ya no estamos para pedir favores, para pedir que nos escuchen, si la Fiscalía no hace su trabajo, entonces nosotros vamos a comenzar a pedir justicia, les parezca o no nuestra forma, no nos importa, no les importa nuestro dolor, el miedo que cargamos, hasta que no falte ninguna compañera, es por nosotros, por los que estamos y por las que ya no están”.
Casi dos horas después, se entonó “Canción sin miedo” y, sin dejar de cantar, las mujeres regresaron al búnker de la Fiscalía para colocar las flores que cargaron durante toda la marcha sobre cientos de fichas de búsqueda y encendieron veladoras para honrar a cada una de las mujeres desaparecidas y víctimas de feminicidio.
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