Las personas con trastornos mentales y conductas antisociales ven violentados sus derechos humanos en todos los ámbitos de su vida a diario, por ello se requiere cambiar la manera en que son tratados, incluido el ámbito jurídico y social, de acuerdo con el especialista Nicolás Iván Martínez.
El libro “Salud Mental Forense”, que recopila 40 artículos de 68 autores, pone sobre la mesa la necesidad de cambiar la perspectiva que se tiene de las personas con discapacidad psicosocial o intelectual y respetar sus derechos humanos desde una mirada empática.
El libro fue presentado el 3 de agosto y su coordinador, Nicolás Iván Martínez López, psiquiatra forense, investigador de ciencias médicas del Instituto Nacional de Psiquiatría Doctor Ramón de la Fuente, habló en la Tercera Emisión del IMER Noticias de la naciente disciplina en salud mental forense.
La salud mental forense es una disciplina propuesta por un grupo de investigadores del Instituto Nacional de Psiquiatría Doctor Ramón de la Fuente, al que pertenece Martínez.
Su propuesta es desarrollar investigación con una mirada inter y transdisciplinaria en todos los campos de interacción de las ciencias forenses, jurídicas y la salud mental para elaborar propuestas en relación a la delincuencia, violencia y estigma en México con una visión de derechos humanos, explicó el especialista.
Las personas con discapacidad psicosocial o intelectual ven violentados sus derechos humanos en todos los ámbitos de su vida a diario. El libro que coordinó busca hacer ver al lector que se necesitan cambios radicales de pensamiento y estructura de algunas figuras dentro del ámbito jurídico y de la práctica de la salud mental.
La publicación reúne a abogados, científicos forenses, antropólogos, psicólogos y psiquiatras. Cada uno contribuyó a hacer visible que a las personas con estas condiciones se le dificulta el acceso a oportunidades como el empleo, matrimonio, votar o ser electos en algún proceso. Tampoco su voz, opinión o voto se respetan.
El libro también pone énfasis en despatologizar y desestigmatizar los trastornos mentales y la conducta antisocial, porque hay muchos factores que influencian en que un sujeto pueda cometer este tipo de conductas independientemente de si padecen trastornos o no.
Respecto la violencia, el psiquiatra forense explica que también es necesario dejar de estigmatizar a quienes cometen estos actos porque no necesariamente tienen una discapacidad social o intelectual.
Covid-19 y salud mental
El confinamiento por la Covid-19 desencadenó problemas de depresión, ansiedad, estrés postraumático y trastornos de dormir. Para ello se requiere de infraestructura y colaboración intersectorial de atención en salud para poder atender correctamente a toda la población.
Ya que se sabe poco de los efectos de la infección en la salud mental de quienes la padecieron, el Instituto Nacional de Psiquiatría va a generar una investigación en personas recuperadas para evaluarlos y saber las consecuencias.