En México los poderes judiciales han buscado reactivar de manera gradual los servicios a lo largo de la contingencia por covid-19. Los que han podido hacerlo en mayor medida han echado mano de soluciones tecnológicas, la llamada justicia digital avanza, y no hay marcha atrás.
IMER Noticias
El profesor Pablo Pruneda Gross, coordinador de la Línea de Investigación de Derecho e Inteligencia Artificial, IIJ de la UNAM, nos habló durante la Primera Emisión de IMER Noticias, sobre las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías en el acceso a la información, una posibilidad muy viable debido al escenario pandémico que el virus del Covid-19 ha traído.
¿Qué es la justicia digital?
El tema de la sistematización de la justicia es un proceso escalonado, en el que hay muchas virtudes a resaltar. Una de ellas es la digitalización de la justicia, que en palabras de nuestro experto, “ofrece la ventaja de implementar las tecnologías que ya conocemos, para contar con expedientes electrónicos y para poder promover vía electrónica que se pueda acceder a los mecanismos de justicia de manera más ágil y más eficiente”.
Por otra parte, la impartición de justicia, la segunda etapa para la sistematización digital, también se vería beneficiada por estas herramientas tecnológicas, como la inteligencia artificial.
“Es contar con el respaldo de algoritmos de inteligencia artificial, que te permitan elegir, por ejemplo, valoraciones previas a iniciar un juicio para tener un porcentaje de éxito o de fracaso ante tu promoción judicial”
Prof. Pablo Pruneda Gross, coordinador de la Línea de Investigación de Derecho e Inteligencia Artificial
Y la tercera fase, sistematizar y generar modelos de algoritmos que permitan generar evaluaciones de riesgo en materia penal.
¿Cuáles son las posibilidades de México para acceder a esta justicia digital?
Los escenarios de impunidad y violación a los derechos humanos que se han visto en nuestro país, generan expectativa ante este tipo de procesos. “Lo que vemos en nuestro país es que este tipo de aplicaciones tecnológicas dependen muchísimo de la jurisdicción de la que estamos hablando”, explica el profesor Pablo Pruneda.
“Tenemos, tristemente, el caso de la Ciudad de México donde vamos muy rezagados y donde el tema de la pandemia lo que ha hecho es congelar procesos, tiempos y el acceso a la justicia”
Prof. Pablo Pruneda Gross, coordinador de la Línea de Investigación de Derecho e Inteligencia Artificial
Es por esto que desde la academia se ha trabajado en concientizar, en primer lugar, sobre las tecnologías que hoy ya existen y ver sus bondades porque el tema de la impartición de justicia es un servicio público que no puede dejarse para después.
Si embargo, es un proceso lento que se irá dando poco a poco ya que implica un cambio de paradigma y una nueva forma de pensar para que la aplicación de éstas tecnologías sea homogénea.
“Encontramos reticencia no sólo en los juzgadores, sino en los propios abogados […], les imponen un cambio en su forma de trabajar y, probablemente, una necesidad de actualización sobre el entendimiento de cosas”
Prof. Pablo Pruneda Gross, coordinador de la Línea de Investigación de Derecho e Inteligencia Artificial
Todos debemos de poner de nuestra parte
El tema de la digitalización de la justicia, además de que es indispensable, no se puede evitar. Nuestro experto reflexiona sobre la oportunidad que ofrece la pandemia de replantearnos la forma en que afrontamos el problema de acceso a la justicia, con todas las desventajas que encuentran un gran porcentaje de los mexicanos para acceder a los sistemas informáticos remotos.
“Porque mientras no tengamos digitalización, no podremos acceder a los siguientes niveles. En este momento, estamos en la primera parte y hay que concluirla”
Prof. Pablo Pruneda Gross, coordinador de la Línea de Investigación de Derecho e Inteligencia Artificial
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