En Estados Unidos, personal de enfermería destaca el uso de herramientas digitales para el tratamiento médico durante la pandemia, mientras que en México y América Latina tienen dificultades para conseguir insumos, trabajan en jornadas extenuantes o se enfrentan a agresiones de la ciudadanía.
La pandemia por coronavirus ha dejado en evidencia las distintas realidades que enfrenta el personal de salud.
En algunos países -los de ingresos altos-, la tecnología ha sido una aliada en la atención de los pacientes. El control de los ventiladores se hace de manera remota y cada uno de los cuidadores tiene acceso a pruebas de equipo de protección previo a la realización de su labor.
En otros, como México y países de América Latina, tienen dificultades para conseguir insumos, trabajan en jornadas extenuantes o se enfrentan a agresiones de la ciudadanía provocadas por la desinformación.
Todas estas experiencias fueron reunidas por la Fundación Index, que reunió a personal de enfermería que a nivel mundial integran 28 millones de personas, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud. México, Estados Unidos, Portugal, España, Reino Unido… ¿cómo hicieron frente a la pandemia? Recuperamos algunas voces.
México, entre la desprotección y las agresiones
En México Francisco Jair López García, enfermero del Instituto Mexicano del Seguro Social, resalta las agresiones sufridas en México, donde sumaron 103 en abril y mayo, según datos de la Secretaría de Gobernación.
<<Un punto crítico en la atención de los pacientes en nuestro país fue el ataque de la población hacia las enfermeras que se encontraban en las calles y portaban su uniforme(…) Entre el miedo y la ignorancia las agresiones fueron aumentando al grado que se tuvo que hacer un llamado a la población por parte de las autoridades nacionales.>>
Esto aunado a otras dificultades como el déficit de personal, la compra de su propio equipo y problemas sociales que conlleva la pandemia, así lo relata el enfermero.
<<Los contrastes que existen y que se agudizaron con las medias que se tomaron… La primera fue la crisis económica que se derivó de ella y la pérdida de los empleos que siguen teniendo Un efecto negativo en la dinámica social del país, con inseguridad, con protestas sociales, altos índices de inseguridad y el miedo de contagio se transformó en impotencia.>>
Colombia, sobrecarga laboral y emocional
En Colombia William Andrés Castiblanco Martínez, enfermero de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Universitario Nacional y profesor del programa de Especialización de Cuidado Crítico, destaca que a pesar de la vulnerabilidad y del difícil manejo laboral y emocional, el personal de enfermería debe de aprender de otras experiencias.
<<La enfermería debe seguir publicando, debe seguir trabajando para transmitir el conocimiento, para que puedan replicar aquellas prácticas exitosas en otros lugares del mundo…>>
España, un vínculo entre los pacientes y sus familias
María Luz Flores Antigüedad, enfermera gestora de casos en el Hospital Universitario San Cecilio, en Granada, narra cómo desde el personal surgió la idea de informar a las familias con pacientes positivos por COVID-19 a través de un Call Center.
<<Vimos la necesidad de aliviar el desasosiego, la incertidumbre, la intranquilidad, el temor la ansiedad, la angustia que tantos pacientes y familiares sufrían, sobre todo familiares que se encontraban en los domicilios totalmente incomunicados.>>
Las enfermeras siempre atendieron al mismo paciente e identificaron al familiar que iban a informar; lo que generó confianza. Les decían lo que comían sus familiares, los medicamentos que les ponían y su estado de salud.
<<Hemos llegado a tener en el hospital donde trabajo unos 250 más o menos personas de covid positivo en 8 áreas diferentes… Empezamos el 25 de marzo y lo mantuvimos hasta el 1 de junio(…) hemos manejado más de 10 mil llamadas telefónicas.>>
María Luz Flores menciona que la experiencia fue fuerte a nivel psicológico y ahora que se permite la movilidad muchos de los familiares de los pacientes van al hospital porque quieren conocerlas. Son encuentros a la distancia y esperan que pronto se den el abrazo que tanto ansían.
Reino Unido, entre turnos extenuantes y pruebas previas
En Reino Unido, personal de enfermería cumple con turnos de hasta 13 horas y antes de asignarlos a otro hospital les realizan pruebas Covid; además, desde antes les hacían test para ver qué tipo de mascarillas deben usar.
<<Tenemos que testearnos qué tipo de mascarilla porque hay diversos tipos de mascarilla. Lo que hacemos es nos la ponemos y nos ponen en una cabeza una escapanta entonces insertan un gas, tenemos que hacer movimientos con la cabeza de arriba abajo con el objetivo de que no podamos saborear ese gas ni olerlo, si no lo saboreamos significa que la mascarilla funciona…Hay gente que no le ha funcionado ningún tipo de mascarilla entonces, en teoría, no deberían cuidar a pacientes positivos o con sintomatología.>>
Nueva York, la tecnología es su aliada
Estados Unidos fue el país que más gastó dentro de la OCDE en materia de salud, al registrar aproximadamente 89 mil pesos por persona (4 mil dólares); en cambio en México se invirtió alrededor de 25 mil pesos (mil 150 dólares), según datos de la OCDE.
Estas diferencias se ven en el uso de herramientas digitales para el tratamiento médico, sobre todo durante la pandemia. Luis Enrique Farfán, Enfermero Avanzado en Nueva York relata su experiencia:
<<Se crearon sistemas para poder manejar todos los sistemas de infusión desde afuera de la habitación, muchos de los ventiladores tienen pantallas que se puede sacar del ventilador y se puede colocar en la parte externa porque funciona bluetooth y pues obviamente el sistema de máscaras y de protección de cada uno de nuestros enfermeros.>>
Para capacitarse también recibieron educación vía zoom. En el hospital una enfermera se dedicó exclusivamente al acercamiento de cuidado paliativo y para estar en comunicación con los familiares de pacientes, lo que les llevó a valorar sus roles…
<<Aprendimos a darle un mayor valor a cada una de las profesiones en que interactúan en el cuidado de todos los pacientes (…) la enfermería es una profesión imprescindible.>>
Portugal, el voluntariado como incentivo
Las enfermeras de Portugal también se pusieron en la primera línea, como relatan en los resultados de un estudio preliminar presentado por Antonio Manuel Marques y Ricardo J. O. Ferreira, enfermeros del Centro Hospitalario y Universitario de Coimbra.
<<Algunas enfermeras se ofrecieron voluntariamente para ser movilizadas en busca de nuevas experiencias de desarrollo personal y profesional, la carga naturalmente fue muy intensa, tanto física como psicológica, había enormes levitaciones como comunicación con el paciente y se adoptaron diferentes estrategias para minorarlo.>>
Los estragos físicos y emocionales son notorios, incluso dentro de sus propias familias, pero aprendieron a convivir con ansiedad e incluso el miedo de contagio. Los protocolos implementados les trajeron ventajas y conflictos…Al final aprendieron a cuidarse entre todos…
<<Los protocolos demostraron ser muy importantes para la seguridad pero también fueron una causa de enorme desgaste y una barrera al cuidado, muchas enfermeras revelaron que no tenían acceso fácil a las pruebas de covid y esto generaba enorme estrés.>>
Al final, con o sin equipo de protección suficiente y de calidad, el personal de enfermería está en primera línea de batalla. Y aunque incrementaron 4.7 millones en sus filas entre 2013 y 2018; aún hay un déficit de 5.9 millones.
En un 90 por ciento son mujeres enfermeras quienes enfrentan la pandemia con todo y miedo de contagio, pocos insumos y entre agresiones, como ocurre en México. Sin embargo, son pocas las que están en puestos directivos, señala la Organización Mundial de la Salud.
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