El Comité de la ONU contra la Desaparición Forzada concluyó su visita a México, recorrió 13 entidades y hoy presentó un resumen y emitió recomendaciones.
Adriana Esthela Flores
En gran parte de México prevalece una situación generalizada de desapariciones, en las que impera una impunidad “casi absoluta” así como la revictimización, señaló el Comité de la ONU contra la Desaparición Forzada, al informar sobre los hallazgos en su visita al país, la primera que realiza en sus once años de historia.
En conferencia de prensa, las y los integrantes de la misión en México presentaron una serie de aspectos generales del recorrido que se extendió desde el 15 hasta el 26 de noviembre y que abarcó 13 estados.
Tras destacar que el gobierno federal haya aceptado la visita, la presidenta del comité y jefa de la misión, Carmen Rosa Villa Quintana, advirtió que en México no se han atendido las causas profundas de las desapariciones, un drama humano que, enfatizó, deja “huellas profundas e irreparables” para las víctimas y la sociedad.
“La impunidad es casi absoluta. Se trata de una impunidad estructural que favorece la reproducción y el encubrimiento de las desapariciones forzadas. Como una víctima nos expresó: De fe y esperanza vive el ser humano, pero habiendo injusticia su alma nunca descansa.
La visita
Integrantes del comité: Carmen Villa, Juan Pablo Albán, Juan José López y Horacio Ravenna, así como dos acompañantes.
Recorrido: Chihuahua, Ciudad de México, Coahuila, Guanajuato, Guerrero, Jalisco, Estado de México, Morelos, Nayarit, Nuevo León, Sinaloa, Tamaulipas y Veracruz.
Acciones: 48 reuniones con más de 80 autoridades y 33 con víctimas y decenas de colectivos de familiares y organizaciones civiles; exhumaciones y jornadas de búsqueda y visitas al Centro de Identificación Humana de Coahuila y varios centros de privación de libertad.
Puntos críticos
- Prevalencia del delito. De 95 mil 121 personas desaparecidas, más de 100 ocurrieron durante la visita del comité.
- Patrones en las desapariciones forzadas, que demuestran complicidad entre agentes estatales y el crimen organizado y algunas cometidas directamente por agentes del Estado.
- Varias recomendaciones formuladas en 2015 y 2018, no han sido implementadas.
- Aumento del número de desapariciones de niños, niñas, adolescentes y mujeres, que se agudizó en pandemia.
- Falta de coordinación entre autoridades y limitadas atribuciones de las Comisiones de Búsqueda Nacional y Estatales, que dificultan la búsqueda en vida o el levantamiento de cuerpos.
- El enfoque de seguridad es insuficiente e inadecuado.
“Para que en México la desaparición deje de ser el paradigma del crimen perfecto, la respuesta a todos estos factores es urgente, tanto para los casos que iniciaron en el pasado, como para los perpetrados recientemente”.
Riesgos que favorecen impunidad
- Ineficacia en la investigación.
- Comprensión desvirtuada de la autonomía de las Fiscalías.
- Traslado a las víctimas de la responsabilidad de investigar y aportar pruebas.
- Sistema procesal penal con inercias del pasado.
Factores que dificultan el acceso a la justicia
- Limitada asistencia jurídica.
- Obstáculos geográficos, idiomáticos y de carácter discriminatorio.
- Inaplicación de mecanismos como el amparo buscador.
- Actitud pasiva de las instituciones judiciales.
“Es necesario también romper el ciclo de revictimización: desaparecen personas, pero también desaparecen cuerpos localizados, y hasta expedientes. Con todo ello desaparece la esperanza de justicia. El grito de desesperación de las víctimas es desgarrador y requiere de una intervención inmediata”.
Puntos denunciados por víctimas
- Demora y falta de resultados en investigaciones.
- Insuficiente articulación entre las entidades de búsqueda e investigación.
- Falta de estándares de debida diligencia, como la búsqueda inmediata, el enfoque diferenciado y el análisis de contexto.
- Ausencia de mecanismos efectivos de rendición de cuentas.
- Ínfima cifra de órdenes de aprehensión ejecutadas y sentencias en casos de desaparición forzada.
Preocupaciones
- Riesgo para quienes se involucran en los esfuerzos de búsqueda, reflejado en el asesinato de varias personas buscadoras y la desaparición de una.
- Estigmatización de personas desaparecidas y familiares.
- La crisis forense, reflejada en más de 52 mil personas fallecidas sin identificar.
“Las personas con las que conversamos nos transmitieron la imagen de una sociedad superada por el fenómeno de las desapariciones, la impunidad sistémica y su impotencia frente a la inacción de algunas autoridades. Nos han señalado que día a día en su búsqueda de respuestas y justicia, son víctimas de la indiferencia y la falta de avances. Nos han expresado con vehemencia su dolor y que las personas desaparecidas no son números, sino seres humanos”.
Recomendaciones
- Política nacional de prevención para erradicar las desapariciones.
- Medidas de atención y reparación integral a las víctimas, con enfoque de género y multicultural y considerar el impacto en hijos e hijas de las personas desaparecidas.
Reconocimientos
- El rol de las mujeres en la lucha contra las desapariciones.
- Compromiso y empatía de ciertos funcionarios del ámbito federal y estatal
¿Qué sigue?
El informe será discutido y adoptado por el pleno del Comité durante su 22° Periodo de Sesiones, que se realizará en Ginebra entre el 28 de marzo y el 8 de abril de 2022.
“El reto es inmenso, lo reconocemos. Ningún proceso o mecanismo puede tener éxito si no cuenta con voluntad política, participación efectiva de las víctimas, así como con recursos financieros suficientes y personal debidamente capacitado, competente y comprometido para llevar a cabo la búsqueda de las personas desaparecidas y las investigaciones sobre su desaparición”.
