Las negociaciones en nuestro país buscarán acuerdos concretos para alcanzar el cese al fuego bilateral y la participación de la sociedad civil en el proceso.
Ariel Escalante
Esta mañana inició en la Ciudad de México el segundo ciclo de la Mesa de Diálogos de Paz entre el gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN).
En la jornada participaron un total de 16 integrantes de las delegaciones de ambas partes, así como del gobierno de México, país anfitrión de la segunda ronda de diálogos y uno de los garantes del proceso.
Esta mañana inició la segunda jornada de diálogos entre el Gobierno de Colombia y la @DelegacionEln en en la CDMX. México es anfitrión y uno de los garantes del proceso.https://t.co/ayDvsjXl8w pic.twitter.com/ootE3gmMIN
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Pero, ¿para qué son estos diálogos y qué se espera de esta etapa?
Hacia un proceso de cese al fuego
La Mesa de Diálogos de Paz es un mecanismo de diálogo político en busca de un acuerdo bilateral para el cese al fuego entre el gobierno colombiano y el ELN.
Los diálogos con esta guerrilla comenzaron en marzo de 2016, durante el gobierno del presidente Juan Manuel Santos, pero se suspendieron en enero de 2019, tras el atentado contra una escuela de cadetes en Bogotá que dejó 23 muertos.
Fue en noviembre de 2022 cuando ambas partes reanudaron el diálogo, ya con Gustavo Petro en el gobierno. En ese primer ciclo de conversaciones de la nueva etapa, realizado en Venezuela, se logró un acuerdo parcial sobre los temas y las condiciones de la mesa de diálogo.
Además, se acordó que la siguiente fase se lleve a cabo en México, uno de los países garantes junto a Venezuela, Cuba, Noruega, Brasil y Chile.
La agenda en México
Las negociaciones, que se podrían extender durante cuatro semanas, abordarán dos puntos centrales: el cese al fuego bilateral y la participación de la sociedad civil en el proceso.
Este lunes, el jefe negociador del ELN, Pablo Beltrán, llamó a buscar un pacto para el cese al fuego definitivo. Aunque advirtió que no se va a producir una “revolución por contrato” ni se decretará una “desmovilización automática de rebeldías”.
“Este segundo ciclo de conversaciones acordará la agenda definitiva de negociaciones, diseñará la más amplia participación de la sociedad en el proceso de paz y se ocupará de los preparativos para acordar un cese al fuego bilateral, temporal y nacional.”
También pidió acuerdos concretos para dar alivio humanitario a las regiones que más sufren a causa del conflicto interno en Colombia y para la libertad de personas consideradas como presos políticos.
Por su parte, el jefe negociador del gobierno, Otty Patiño, exigió el cumplimiento de los acuerdos que se ponen sobre la mesa y lograr acuerdos permanentes.
“No vamos a pactar ninguna tregua, sino que promoveremos decisiones que generen alivios permanentes, no temporales”.
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