El Andamio
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Unesco expresó su preocupación por el conflicto armado en Ucrania y pidió que se respete el Derecho Internacional Humanitario para proteger a los ciudadanos y al patrimonio cultural.
El organismo, con sede en París, a través de un comunicado instó a que se cumpla en particular la Convención de La Haya de 1954 para la Protección de los Bienes Culturales en caso de Conflicto Armado y sus dos Protocolos para garantizar “la prevención de los daños al patrimonio cultural en todas sus formas”.
La misiva señala que también se deben garantizar las obligaciones derivadas de la Resolución 2222 del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la protección de los periodistas, los profesionales de los medios y el personal asociado en situaciones de conflicto.
En el comunicado recordó que los medios de comunicación libres, independientes e imparciales son uno de los fundamentos esenciales de una sociedad democrática.
La Unesco pide que el gobierno ruso se abstenga de cualquier ataque o daño a los niños, los docentes, el personal educativo o las escuelas.
La UNESCO está profundamente preocupada por las operaciones militares en curso y la escalada de violencia en #Ucrania.
Pedimos que se respete el derecho internacional humanitario, que no se ataque a la educación ni a los periodistas, y la protección del patrimonio cultural. pic.twitter.com/ASWe0BQux4
— UNESCO en español 🏛️#Educación #Ciencia #Cultura (@UNESCO_es) February 24, 2022
Las joyas del patrimonio cultural de Ucrania
Ante el ataque de Rusia contra Ucrania, los museos y espacios culturales de las ciudades como la catedral de Kiev y el Museo Nacional de Historia, permanecerán cerrados.
La Catedral Santa Sofía de la ciudad de Kiev fue declarada patrimonio mundial de la Unesco es el símbolo de la “Nueva Constantinopla”, denominación dada a la capital del principado de Kiev, creado en el siglo XI en una región evangelizada después del bautismo de San Vladimir en el año 988.
La influencia espiritual e intelectual del monasterio de Kievo-Petchersk contribuyó considerablemente a la propagación de la fe y el pensamiento ortodoxos en el mundo ruso entre los siglos XVII y XIX.
El Museo Nacional de Historia de Ucrania, cuya colección posee 800 mil objetos, entre arqueología, numismática, armas, artes decorativas, manuscritos, grabados antiguos, pinturas, gráficos y reliquias del movimiento de liberación nacional ucraniano del siglo XX.
El museo, que actualmente refleja la historia de Ucrania desde la antigüedad hasta el presente, tuvo momentos de conflicto al presentar y preservar con mayor énfasis ciertas disciplinas antes que otras, lo que explica los 12 cambios de nombre, una suerte de competencia entre sí de sus colecciones arqueológica, etnográfica, histórica, artística, industrial y editorial.
Ucrania ha querido separarse de la idea de ser el hermano menor de Rusia por lo que ha apostado en su infraestructura cultural y artística, como lo resaltó el arquitecto Felipe Leal, titular del Seminario de Cultura Mexicana.
Es una riqueza arquitectónica. Tiene una gran riqueza urbana y arquitectónica es una zona del mundo con ciudades muy bellas, muy bien constituidas. Felipe Leal, arquitecto
Otro punto fuerte de la cultural local, es el Museo Nacional de Arquitectura y Vida Popular, un complejo arquitectónico y paisajístico de todas las regiones históricas y etnográficas de Ucrania.
Este “museo al aire libre” posee unas 100 mil exhibiciones diversas de temas como artesanías, ropa popular, telas, muebles, herramientas, cerámica, carpinteros, ebanistas, herreros, pintura, instrumentos musicales, juguetes para niños y más, según consigna su página web.
El circuito cultural lo conforma también el Museo de Bellas Artes de Odessa, una ciudad imperial, para algunos una suerte de Ibiza de ese país, que funciona en el Palacio Potocki y alberga más de 10 mil piezas de arte, incluidas pinturas de artistas rusos y ucranianos.
El titular del Seminario de Cultura Mexicana, Felipe Leal aseguró que la guerra en Ucrania confirma la necesidad del diálogo y de la apuesta de los países por la cultura, con conocimiento y con sensibilidad el ser humano evitaría la guerra.
“Pues una guerra de esta naturaleza, lamentablemente lo primero es la pérdida de vidas humanas y la incapacidad del diálogo que puede existir en la humanidad. La incapacidad de poder llegar a acuerdos o las diferencias que lamentablemente se ha polarizado mucho en el mundo actual.
Entonces, pues sí, sí, estamos viviendo una época, muy poco agradable a nivel general, de las relaciones humanas de las relaciones entre los países. De la confrontación que hay por las diferentes formas de pensar y yo estoy convencido que la cultura es lo único que nos pueden salvar. Siempre nos ha salvado en los momento más difíciles”. Felipe Leal, arquitecto.