Con el descubrimiento de dos hornos de cal localizados en la zona arqueológica de Monte Albán se revelan datos claves para conocer más sobre su construcción y son piezas fundamentales para completar el mapa de edificación del sitio arqueológico considerado Patrimonio Cultural de la Humanidad desde 1987.
Carolina López Hidalgo
Para Nelly M. Robles García, del Centro INAH Oaxaca Monte Albán es estudiado desde la década de 1930 por expertos como Alfonso Caso, y en los grandes edificios de roca que vemos hoy se sabe que al interior fueron erigidos con rocas, tierra y cal, pero hasta ahora se desconocía el origen de este último material.
“Con la presencia de estos hornos hoy sabemos que la cal era quemada allí mismo, a partir de las piedras calizas en el cerro de Monte Albán y eso es un gran hallazgo, porque nos permite casi ver el proceso de la construcción trabajado con mucha mano de obra y materiales primordialmente locales, lo que es un avance muy interesante para entender los procesos de construcción masivos”.
A través de la técnica de datación de arqueomagnetismo especialistas calculan que el primer horno todavía estaba en uso entre los años 1076 y 1321 después de Cristo mientras que el segundo lo estuvo entre el 713 y 883 después de Cristo
El descubrimiento y estudio de estos hornos fue realizado por el y el Instituto Nacional de Antropología e Historia los cuales siguen trabajando en conjunto en la zona de donde ya fueron halladas, una mineralogía cerámicas y huellas de quemas mismas que ya están siendo analizadas.
Por su parte Avto Goguitcghaichvili, titular servicio arqueo magnético nacional de la UNAM con este descubrimiento se completan el mapa de construcción empleado por los zapotecas, y aseguró que el producto lo elaboraban artesanos que contaban con el conocimiento necesario para manejar el fuego
“El hallazgo de hornos de cal en Monte Albán es importante, ya que no se habían registrado en investigaciones previas y se vinculan con la tecnología de la construcción en Mesoamérica, definiendo los materiales empleados por los zapotecos que habitaron el sitio”, comentó Goguitcghaichvili”.