Ciudadanos estadounidenses devolvieron a México 79 piezas arqueológicas de diversas culturas que permanecieron por varias décadas en su familia.
La ceremonia de repatriación se llevó a cabo en el Consulado de Los Ángeles con la presencia del secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard.
Amelia Rojas
El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubon, encabezó la ceremonia de entrega-recepción de 79 piezas arqueológicas que permanecieron en Estados Unidos, las cuales ya fueron regresadas a México por ciudadanos de esa nación.
La ceremonia se realizó en el Consulado Mexicano en los Ángeles, California, donde se lleva a cabo la Novena Cumbre de las Américas.
Al recibir las piezas arqueológicas, el canciller dijo que el Gobierno mexicano estaba sumamente conmovido por la “acción generosa” de los particulares que decidieron regresarlas al país.
“Es muy conmovedor que ustedes estén aquí, que nos permitan retornar a México estas piezas tan importantes. Como ustedes saben, es una prioridad para México recuperar su patrimonio histórico y artístico, y este es un gran gesto de ciudadanas y ciudadanos estadounidenses comprometidos con la sociedad mexicana y que tienen interés en que se reintegren a nuestro país. Así que estamos profundamente conmovidos y muy agradecidos con ustedes”
Bill Lewis, ciudadano estadounidense explicó que estás piezas arqueológicas permanecieron en su familia durante tres décadas, bajo el cuidado de su madre, Carol Lewis fallecida en 2014, y que desde hace 5 años han intentado devolverlas a México, pero hasta ahora pueden regresar a su lugar de origen.
“Es importante que estas piezas sean devueltas a las personas que las crearon y también a las culturas que las crearon. Fueron hechas para celebrar vidas, conmemorar eventos significativos, honrar a las personas y contarles a quienes vinieron después de ellos lo que importaba y por qué.
Devolviendo estas bases, tazones, figuras, armas, se encuentra con lo que estudiamos adecuadamente y luego usamos para brindar educación y disfrute para una audiencia amplia y esa audiencia entenderá lo que importa
Así que finalmente llegamos a esta colección por accidente y por ascendencia no los creamos ni pudimos compartirlos más allá de una vitrina en nuestra sala o peor aún una caja en nuestro garaje. Así que estamos muy contentos de devolverlos a su hogar a las personas y culturas que los conocen y los aprecian tanto”.
Rashel Mareness, ciudadana de Estados Unidos agregó que las piezas que devuelve a México estuvieron en poder de su tío, que fue un gran admirador de las culturas mesoamericanas, pero que ahora es momento de regresarlas a México.
Piezas repatriadas
Entre los bienes entregados se encuentran objetos pertenecientes a las culturas maya, zapoteca, teotihuacana, así como de la tradición Tumbas de Tiro y de las asentadas en el Altiplano Central, occidente y el Golfo de México.
Destacan bienes paleontológicos: dos placas con impresión de fósiles de peces, en formato de lajas recortadas. Por las características morfológicas y estilísticas, se trata de dos especímenes de la orden Clupeomorpha, provenientes de territorio mexicano.
De los 79 bienes arqueológicos sobresale un vaso trípode estilo maya elaborado en el sureste de México durante el periodo Clásico mesoamericano (400-900 d.C.), es de barro modelado, pulido y aplicación moldeada. Muestra decoración en bajorrelieve en el exterior del cuerpo, consistente en una franja superior de glifos y una escena central, enmarcados en un rectángulo, en el que se observa un personaje sedente ricamente ataviado.
Se distinguen también un par de piezas que son originarias de la tradición cultural de Tumbas del Tiro, la cual se desarrolló entre los años 100 a.C. al 600 d.C. en el occidente de México: una vasija efigie hecha en barro mediante las técnicas de modelado, alisado y pulido que representa a un cánido en postura habitual; una figura antropomorfa, también de barro trabajada mediante las técnicas de modelado, alisado, aplicación de pastillaje e incisión, que representa a un personaje masculino de pie, desnudo, que porta tocado, un mazo y muestra escarificaciones en el área de los hombros.