Para el clavadista esto significa su despedida de los Juegos Olímpicos, pues desde septiembre se enfocará en su tarea como diputado federal.
Irma Cuevas
Después de mucho dilucidar y a 30 días de la inauguración de los Juegos Olímpicos, fue designada la pareja, hombre y mujer, que será la abanderada de la delegación mexicana en Tokio 2020. La decisión, que comúnmente está basada en la trayectoria de los atletas, así como sus posibilidades de presea en la justa, rebasó en esta ocasión el plano deportivo.
Los requisitos complicaban la nominación, entre ellos ajustarse a los protocolos de seguridad sanitaria que obligan a ocupar la Villa Olímpica cinco días antes de la competencia, además de procurar nombrar a algún atleta cuya competencia no sea próxima al 23 de julio, fecha de la inauguración, para cuidar al cien por ciento su concentración.
El clavadista Rommel Pacheco y la golfista Gaby López fueron designados de manera unánime por el Consejo Ejecutivo del Comité Olímpico Mexicano.
Rommel competirá en sus cuartos y últimos Juegos Olímpicos en la prueba de trampolín de tres metros, ya que al finalizar Tokio se retirará del deporte para iniciar su carrera política como diputado federal. Ha sido medallista en campeonatos mundiales, copas del mundo, series mundiales, Juegos Panamericanos y Juegos Centroamericanos y del Caribe.
“Ser abanderado es un honor, pero también es una gran responsabilidad que la asumo preparándome para la recta final y, si todo sale bien, estaré peleando por la medalla en mis últimos Juegos Olímpicos”.
Gaby López asistirá por segunda ocasión a una justa olímpica. En su carrera deportiva en tres ocasiones fue campeona colegial, como profesional ganó los torneos de Blue Bay LPGA 2018 y Tournament of Champions 2020, celebrado en Orlando, Florida.
“Estoy muy emocionada, muy contenta por esta oportunidad que me ofrecen, no hay honor más grande para un atleta que poder portar y llevar la bandera nacional en una ceremonia tan especial como unos Juegos Olìmpicos, estoy a punto de vivir una experiencia única en la vida y que se va a quedar en mi corazón para siempre”.
Rommel Pacheco y Gaby López llegarán cinco días antes de la ceremonia de inauguración, después deberán de cumplir con el protocolo de sanidad que implica un aislamiento y pruebas continuas PCR para entrar en competencia hasta la segunda semana de los Juegos Olímpicos.