Expertos del Instituto Nacional de Antropología e Historia y de la UNAM identificaron una nueva especie de dinosaurio: Tlatolophus galorum, luego de estudios a un fósil localizado en 2013 en Coahuila. Los resultados de este estudio fueron publicados en la revista científica “Cretaceous Research.
Amelia Rojas
Luego de diversos análisis a los restos de un dinosaurio localizado en 2013 en General Cepeda, Coahuila, paleontólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia y de la Universidad Nacional Autónoma de México determinaron que se trata de una nueva especie: Tlatolophus galorum.
Durante la excavación realizada en el Ejido Guadalupe Alamitos se encontró la cola articulada y diversos huesos del reptil, como el fémur, la escápula y diversos elementos que al reunirlos, formaron una cresta; al hacer la comparación del saurio con especies ya conocidas en la región, los expertos concluyeron que no había similitudes y se trata de una nueva especie.
El maestro en Ciencias por la UNAM, Ángel Alejandro Ramírez Velasco, coautor de la investigación que fue publicada en la revista científica Cretaceous Research explicó en entrevista las características del dinosaurio.
“Este animal le llaman Dinosaurios pico de pato, son dinosaurios herbívoros, pacíficos, que comían todo tipo de materia vegetal, se sabe que estos dinosaurios comían incluso corteza de árbol y que además tenían alrededor de mil 800 dientes con lo cual podían masticar todos estos materiales vegetales. Es decir que eran buenos masticadores, esto es importante porque en general un reptil, una tortuga o incluso un ave, no mastican. Curiosamente este grupo de saurios sí podían masticar, se cree que fue el don que les permitió ser especialistas y ser muy abundantes en el hemisferio norte.”
Dadas las características del cráneo, que fue el aspecto más peculiar del dinosaurio por la forma de vírgula, el investigador de la UNAM, le dio el nombre Tlatolophus galorum que tiene un origen náhuatl.
“Me gustó mucho la idea de ponerle una etimología náhuatl porque a nivel mundial ya los nombres de los saurios no solo utilizan términos latinos o griegos, sino que también utilizan hasta de lenguas antiguas o actuales. A este le quise poner un nombre náhuatl: el nombre de Tlatolophus viene del término tlahtolli, que es el símbolo de la vírgula, por la forma de la cresta, lophus que es un término griego para designar la cresta, es decir cresta en forma de vírgula o en forma de palabra, que es lo que significa tlahtolli ”
La publicación en la que se da a conocer el hallazgo, que fue validada por la comunidad científica en la revista dedicada a temas del cretácico, es solo el inicio de una larga investigación sobre los fósiles de este reptil, como explicó Ángel Alejandro Ramírez Velasco.
“De este dinosaurio queda mucho por estudiar, apenas ahora se hizo prácticamente el anuncio de que es una nueva especie utilizando solo la cabeza, pero nos falta limpiar toda la cola, algunos huesos de los hombros y las piernas. ¿Por qué son importantes estos huesos?, porque con ellos puedo saber cuestiones sobre la biomecánica, si era un animal que podía correr, caminar, trotar, de qué tamaño era. Ahora sabemos por ejemplo que la cola era de 6 metros de largo, su cabeza mide un 1.32 metros con todo y la cresta, por eso se calcula que fue un animal de 12 metros de largo. Así que aún falta mucho por estudiar y además queremos hacerle estudios de aspectos neurológicos”.
Cabe destacar que la cola articulada del Tlatolophus galorum se exhibe actualmente en la cabecera municipal de General Cepeda, Coahuila donde, con apoyo del ayuntamiento, se habilitó un espacio en el que los habitantes del municipio y visitantes pueden conocer los vestigios de este antiguo habitante de la Tierra.