Los empresarios encendieron luces de alerta ante el panorama que enfrenta la economía mexicana, por lo que propuso un paquete de 21 acciones y lineamientos emergentes “para producir efectos rápidos en materia de inversión y de empleo”. Entre las medidas planteadas están otorgar incentivos fiscales que contrarresten la disminución que se espera de la inversión extranjera; reducir la deuda a menos de 40% del PIB para evitar una baja en la calificación crediticia.
Asimismo, ejercer sin demora el gasto público e iniciar los proyectos y los pagos en el primer bimestre de 2017; dar flexibilidad a las asociaciones público-privadas; asegurar un financiamiento a las pequeñas, medianas y grandes empresas; combinar programas de banca de desarrollo con banca comercial; y que las entidades federativas y los municipios hagan un esfuerzo por lograr una mayor recaudación
