A pesar de que hoy en día se producen tres veces más alimentos, necesarios para toda la humanidad, el hambre y la desnutrición siguen azotando a amplios sectores poblacionales de países de África, Asia y América Latina.
Desde el siglo pasado, la situación alimentaria mundial entró en crisis. Ya no se valora como antes a las familias campesinas, que son quienes producen nuestros alimentos, ni importa su origen.
De ahí que uno de los objetivos del “Día Mundial de la Alimentación” que se conmemoró el pasado 16 de octubre, sea concientizar a la gente para que lleve a su mesa alimentos no sólo sanos, sino también con un origen y una identidad; de esta manera se nutrirá mejor e incluso contribuirá a la recuperación del medio ambiente. Escucha más sobre este tema.