Las plataformas de información para el desarrollo de vacunas contra el SARS, MERS y Ébola, dieron ventaja a la ciencia para la creación de una vacuna contra el covid-19, la cual podría estar lista en año y medio.
Guadalupe Franco
Los avances científicos y tecnológicos permiten que la ciencia pueda dar pasos acelerados en la búsqueda de una vacuna contra el virus causante de la enfermedad de covid-19, cuyo desarrollo podría tardar hasta 10 veces menos tiempo del que tomó en el pasado, cuando encontrar una posible cura llegaba a tardar hasta 15 años.
La aparición del SARS, el MERS e incluso el Ébola dieron origen a una serie de plataformas de información que hoy dan ventaja al mundo, donde están en proceso al menos diez vacunas contra el virus SARS-COV-2.
El doctor Adrián Camacho Ortiz, jefe de Epidemiología del Hospital Universitario del Sistema TecSalud, del Tecnológico de Monterrey, destaca que todos estos ensayos clínicos permiten conocer las estructuras de vacunación y reducir los tiempos en el desarrollo de las mismas.
«Tiene que ver mucho con la plataforma que se utiliza para estas vacunas; esta es una enfermedad relativamente nueva, pero estas plataformas las entendimos en los últimos 20 años y vinieron a cambiar la forma en como generamos vacunas. Aprendimos en los últimos 20 años con la primera versión de SARS, aprendimos con MERS a conocer los detalles de los coronavirus. Y aprendimos también esa nueva estructura de vacunación con Ébola».
Doctor Adrián Camacho Ortiz
Además de los métodos tradicionales que funcionan con virus atenuados o inactivados, así como el uso de proteínas recombinantes, hoy en día los portafolios de vacunas ofrecen inmunizaciones a partir del ADN y de vectores, los cuales actúan como una infección natural lo que permite al sistema inmunitario combatir los virus o gérmenes.
Pero la rapidez no es sinónimo de efectividad y puede conllevar riesgos en el caso del virus SARS-COV-2. Así lo señala el doctor Michel Martínez, líder de la Unidad de Vigilancia Epidemiológica de TecSalud.
«Tiene tres peligros. Uno, estamos avanzando muy rápido, a lo mejor no estamos valorando bien la seguridad en los pacientes. Dos, una cosa es que genere la respuesta inmune, pero lo más importante será cuánto tiempo va a durar esta respuesta. Y también hay presión política y eso es malo; cuando en la ciencia se mete la política puede llegar a ser peligroso».
Doctor Michel Martínez
Dichos riesgos no implican que una vacuna no pueda ser segura. Entre las que actualmente están en fase de prueba, los científicos han advertido reacciones adversas como cansancio general o fiebre, que en algunos casos está ligado a la generación de anticuerpos, afirma el doctor Adrián Camacho.
¿Cuál es el porcentaje de protección que debe tener una vacuna?
La Administración de Medicamentos y Alimentos, FDA, aprobará inmunizaciones que cumplan con el 50 por ciento de protección. Esto debido a que el virus tiene un grado de transmisión de 3.5 por ciento.
Las farmacéuticas tienen un parámetro mayor: buscan generar una protección de entre 60 y 70 por ciento. Al tiempo que la pandemia avanza y en algunos países retoma fuerza, los gobiernos, incluido el de México, tienen la mira puesta en el desarrollo de una vacuna para una eventual recuperación de la economía y también de la normalidad, una posibilidad que podría ocurrir a mediados de 2021.
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